Berthy Vaca Justiniano. El Deber.

Miembros de una banda de proxenetas utilizaron la red social Facebook para engatusar a una joven de 18 años que terminó siendo dopada y violada por un empresario. Luego de la denuncia, la Policía capturó al autor del abuso, a un intermediario y a una mujer cómplice, que están siendo procesados por los delitos de violación y trata de personas con fines de explotación sexual, según fuentes oficiales.

Hace un mes, una tal Paola M.S. solicitó a Cristina que la aceptara como amiga y desde entonces chatearon fluidamente hasta que la desconocida acabó llamándola por teléfono para preguntarle sobre sus actividades y su familia.

El viernes pactaron un ‘junte’. La chica acudió al sitio convenido, pero la amiga no llegó. Se presentó un sujeto que dijo ser primo de Paola, que le invitó un vaso de soda (con somnífero) y la dopó. Luego la entregó al empresario Neil Ricardo C.T., que la llevó a su apartamento, abusó de ella e incluso filmó todo el vejamen.

Cristina, que aseguró que era virgen, sufrió un desgarro vaginal de siete centímetros al parecer causado por un objeto extraño. La herida le provocó una hemorragia que el agresor intentó detener con unas tabletas, pero no lo consiguió, por lo que optó por abandonar a su víctima

“Ella fue intervenida quirúrgicamente para frenar la hemorragia”, indicó la fiscal Giovana Rivas. La autoridad agregó que se inició un proceso por violación agravada y otro por trata de personas con fines de explotación sexual.

A Neil Ricardo C.T., que supuestamente es gerente de una empresa distribuidora de acero, se le secuestró una computadora en su domicilio, en la que están grabadas las imágenes de la violación a la joven. Gabriel Condori, jefe de la Felcc en el Plan Tres Mil, dijo que hay más videos, al parecer, de otras víctimas, pero por el momento no cursan denuncias contra el individuo.

Pedro, tío materno de la muchacha, espera que la Policía capture a Paola M.S. y que intervenga la página en el Facebook de la reclutadora para ver la posibilidad de ubicarla.

Pedro fue pieza fundamental para la aprehensión de los ahora imputados. Dijo que el empresario fue capturado en su oficina ubicada al frente de un colegio, en la zona de la avenida Mutualista; la mujer cómplice cayó en la avenida Escuadrón Velasco, y al intermediario lo ‘cazaron’ en inmediaciones de Aprecia, donde la Policía le tendió una trampa.

Los padres de la muchacha y ella misma manifestaron que el violador es un sujeto influyente, pero descartan un arreglo económico, solo quieren justicia para los autores.

“No confíen, nada borrará lo que pasé”

Habla la víctima

La Internet es de doble filo, hace el bien o el mal. Deberíamos usarla para ver informaciones o comunicarnos con  nuestras familias que están en otros países, porque a veces agarramos confianza de personas que desconocemos y que quieren hacernos el mal.

Ellos (los proxenetas) se hacen los pobrecitos para que uno les dé confianza y uno, a veces, es de corazón blando y pasa todo esto.

No quiero que los jóvenes, y sobre todo las chicas, pasen lo que yo pasé, quiero que eviten eso, porque el dolor que sufrí nadie me lo va a borrar; el daño ya está hecho.

No quiero que nadie pase lo que estoy pasando. No confíen en nadie solamente en sus padres y en sus hermanos.

La chica me solicitó como amiga en el ‘Face’ y yo la acepté. Chateábamos y me pidió mi número telefónico. Ella se comunicaba conmigo de un número privado o de un centro de llamada, nunca de un número fijo. Me preguntaba dónde vivía y por mi familia; empecé a agarrarle confianza.

Un día subí una foto y como no podía borrarla porque no tengo computadora, pedí a ella que la borrara; le di mi contraseña y entró a mi cuenta en el ‘Face’, se hizo pasar por mí. Desde mi página escribía precios por actos sexuales como si yo estuviera haciéndolo.

Yo no quiero plata, quiero justicia, porque si dejo pasar esto ellos van a seguir dañando con su mente enferma a otras personas. Gracias a Dios estoy viva, pero otras muchachas pueden hasta morir porque son depravados, no son personas humanas.