Amalia y hermana de luz

Cosecha Roja.-

Esta mañana el abogado y los familiares de Luz Gómez y Diego Romero tenían una audiencia para tratar la morigeración de la pena de Diego. Cuando llegaron a los Tribunales de Morón, la audiencia se había suspendido. Creyeron que la cancelación retrasaba el proceso. Pero la jueza de Garantías, Mónica López Osorno, salió a darles una buena noticia. Las comparaciones de ADN entre la sangre que se encontró en la escena del crimen y la que le extrajeron a la pareja jujeña, habían dado un resultado negativo. Luz y Diego no estuvieron en la casa del colectivero asesinado en Castelar el 1 de octubre de 2011. Luz y Diego estuvieron presos un año y dos meses por un crimen que no cometieron.

“Estamos muy contentos. Sólo falta que declaren dos procesados. Pero no queremos esperar más. Es una prueba científica que no pueden eludir. Mañana el abogado va a pedir el sobreseimiento de Luz y de Diego”, dijo a Cosecha Roja Amalia Gomez, la madre de la joven.

El pedido de comparación de ADN fue realizado por el abogado de la pareja, Eduardo Suárez, en octubre del año pasado. En noviembre les extrajeron sangre a Luz y a Diego. En ese momento les prometieron los resultados para el 10 de diciembre. Esa fecha no se cumplió. Recién el 18 de febrero los peritos pudieron hacer las comparaciones. Y ahora pudieron acceder a los resultados. Con este nuevo panorama Luz y Diego podrían salir en libertad la semana que viene.

“Todo lo que se consiguió se hizo por presión. Hacíamos una movilización en la puerta de los Tribunales y conseguíamos una audiencia o una reunión. No puede ser que la Justicia sea así”, dijo la mamá de Luz.

La joven de 28 años, desde su casa en Jose C. Paz donde cumple el arresto domiciliario, habló con Cosecha Roja: “Lo llamé a Diego y le pregunté si estaba contento. Pero me dijo que no iba a estarlo hasta que no salga de ahí. Es mucho el sufrimiento que pasamos. Las extracciones de sangre era lo primero que tenían que hacer hace un año y dos meses. Pero hasta que no lo pedimos nosotros no lo hicieron”.

Luz Gómez y Diego Romero vivían junto a su beba Zaira. Él trabajaba en una metalúrgica y ella en una fábrica de tinturas. Habían venido de Jujuy para ahorrar . En julio de 2011 se olvidaron una mochila en un remis. Dentro de esa mochila había un comprobante de vacunación de su hija Zaira.

Ese olvido cambió sus vidas. El 21 de diciembre de 2011 la policía irrumpió en su casa de Villa Ballester y se los llevó detenidos. Los acusaban de haber asesinado a Roberto Castillo en Castelar. La mochila que habían perdido tiempo atrás apareció en la escena del crimen.