infojus noticias

Foto: Mariano Armagno.

Esta mañana llegaron dos telegramas más a los trabajadores de Infojus Noticias. Desde que comenzó la nueva gestión, suman 15 los periodistas despedidos. El ministro de Justicia, Germán Garavano, ya venía anunciando que no quería una agencia de noticias, y en una entrevista en radio Vorterix dijo que el sitio había funcionado como “una herramienta o una lanza de presión contra un enemigo de turno”. El 4 de febrero, más de 11 mil notas que formaban parte de la agencia y estaban online, fueron borradas a mano, una por una. La Procuvin presentó un amparo por el contenido que ya no puede leerse en la web. Esta es la crónica de un vaciamiento que empezó el día del traspaso presidencial.

El 10 diciembre de 2015 a las 8 de la mañana, dos mujeres y un hombre entraron al edificio Tandanor en Costanera Sur, donde funcionaba Infojus Noticias. Los había precedido un cuarto, que aseguró la agencia era un lugar valioso y la idea del nuevo gobierno era hacerla crecer. Mientras Mauricio Macri juraba como presidente en el Congreso de la Nación, la agencia de noticias era intervenida. Los enviados del nuevo ministro de Justicia Germán Garavano se sentaron junto a los editores y pidieron bajar dos artículos, que fueron retirados de la home: “Procelac denunció a la empresa que quiere cobrar bonos de la dictadura” y “Cristina Fernández de Kirchner se despidió de la presidencia”.  

El conflicto en ese momento recién comenzaba. Siguió con la drástica disminución de las noticias que se subían y con la pérdida de miles de lectores.  Pese a la promesa de mantener los puestos de trabajo de los 40 redactores, editores, fotógrafos y productores que hizo la nueva directora de la agencia, Sabrina Santopinto, el 29 de diciembre comenzaron los despidos. Primero el jefe de redacción y la subdirectora. Para la primera semana de febrero, ya sumaban 13 los trabajadores echados.

Un artículo en el diario Clarín había anticipado el 27 de enero y a su modo, lo que estaba apunto de suceder. Con el título “Justicia: una agencia de difusión K con más de 200 empleados”, la nota denunciaba que Infojus Noticias era “una usina de propaganda política” y citaba fuentes oficiales. Un mes después, Garavano confirmó al diario El Cronista que Infojus fue “un órgano de propaganda política” y advirtió que no iba “a haber una agencia de noticias” dentro de su cartera. Mientras, los despidos continuaron.

El 4 de febrero 11.700 artículos (de un total de 11.700 notas, videos, fotografías e informes multimediales) publicados en un lapso de tres años, se volvieron inaccesibles. “Lo que nos sorprendió luego fue el avance brutal sobre los contenidos que no se dio en Télam ni en Radio Nacional, donde empezaron a limitar las coberturas”, dijo esta mañana en Vorterix Cristian Alarcón, el ex director de la agencia. Las últimas notas publicadas en el sitio son del día 11.

Sorprende la rapidez de la depuración: en el sistema Unix, que utilizaban los servidores del portal, cada nota debe ser eliminada a mano, una por una. Cuando un usuario solicita el ingreso el servidor, la computadora generalmente indica una fecha: el 31 de diciembre de 1969, día del golpe de Estado de la autodenominada Revolución Argentina. Ese día empezó a funcionar, por primera vez, el sistema operativo Unix. Esa es la fecha que aparece en cada uno de los archivos borrados de la agencia.

Consultado por la situación de Infojus Noticias, el ministro Garavano afirmó ayer en el programa de Reynaldo Sietecase en Vorterix que “todas esas notas no se borraron, están siendo puestas en otro formato a disposición de la gente que las quiera ver. Es un deslinde de responsabilidad, porque el Ministerio de Justicia no se hace cargo de esos contenidos. [La agencia de noticias] estaba tomando funciones alejadas de la neutralidad que nosotros queremos”.

Ayer Garavano presentó el plan del nuevo sitio de información, Justicia2020. Será “un portal de relaciones con la comunidad”, “más pedagógico, que acerque la justicia a la gente que lo necesita” y no “una herramienta o una lanza de presión como un enemigo de turno”, dijo el ministro.

La censura a las notas también marcó agenda. El 98 por ciento de los artículos sobre los fondos buitres se volvieron inaccesibles. El vaciamiento incluyó el 97 por ciento de las publicaciones de trata de personas, el 94 por ciento de violencia de género y el 96 por ciento de violencia institucional. También desaparecieron el 84 por ciento de los artículos dedicados a los nietos recuperados, entre ellos toda la información sobre la restitución de Ignacio Montoya Carlotto, el nieto de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto. Esta mañana, Alarcón le dijo a Vorterix: “Infojus Noticias debe haber tenido algo que el gobierno nuevo sospechaba era peligroso”.

La abogada Graciana Peñafort explicó a Cosecha Roja que los archivos de un medio digital financiado por el Estado deben estar disponibles. “Cuando decidís borrar notas que han sido producidas por el Estado, es como quemarlas. No es ordenar tu escritorio, es destruir un patrimonio documental que pertenece a todos”, dijo.

Infojus Noticias nació en marzo de 2013 con el lema “Detrás de los expedientes hay personas”. Su objetivo era retratar las historias de vida detrás de la Justicia. “El periodismo no es sólo un asunto de datos, de transcripciones y de citas textuales, sino que puede mostrar un conjunto de tramas sociales y culturales, narradas con el lenguaje de la gente”, contó Alarcón en Vorterix. También la agencia funcionaba como un “espacio de experimentación periodística” con cientos de videos, informes multimedia y galerías de fotos. Una de ellas (un especial dedicado a la ex-Esma y realizado por el fotógrafo Leo Vaca) fue finalista del premio García Márquez.

Hoy, la Comisión por la Memoria se presentó como amicus curiae en un amparo de la Procuvin para asegurar el acceso a los documentos eliminados de Infojus. Alarcón reconoció la contradicción legal en el accionar del Ministerio de Justicia:  “Creo que el ministro, que es abogado, por suerte sabe que podría enfrentarse ante una situación jurídica complicada si permanece este vaciamiento”. La libertad de prensa es asegurada por el artículo 14 de la Constitución Argentina y el acceso libre a la información pública -considerado como una de las “garantías básicas para democracia”- es reconocido por la Declaración Universal de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, ambos con fuerza constitucional en el país.