Milenio.-

El procurador de Coahuila, Homero Ramos, confirmó que los cuerpos de Heriberto Lazcano Lazcano, “El Lazca”, y de otra persona identificada como Mario Alberto Rodríguez Rodríguez, fueron sustraídos de la funeraria García, de la ciudad de Sabinas, la madrugada del lunes 8 de octubre por un grupo armado.

En conferencia de prensa, el funcionario estatal detalló que los hombres entraron alrededor de las 02:00 de la mañana a la funeraria, sometieron al personal que se encontraba en el lugar y tomaron los cuerpos en una carroza para darse a la fuga.

“El dueño nos informó de lo sucedido alrededor de las 8:05 de la mañana”, dijo.

Homero Ramos explicó que el pasado 7 de octubre se reportó un enfrentamiento en la zona de Progreso, Coahuila, motivo por el cual se trasladaron las distintas policías al lugar.

Recordó que elementos de la Secretaría de Marina pasaban cerca de un campo de beisbol donde se percataron de un automóvil, el cual tenía el reporte de que había participado en un enfrentamiento.

Los elementos castrenses le pararon el alto; sin embargo, la reacción de los tripulantes fue atacarlos con granadas, por lo cual al responder la agresión mataron al conductor, mientras que el acompañante intentó huir del lugar, pero fue alcanzado por las balas de los marinos.

El conductor fue identificado como Adalberto Rodríguez Rodríguez, de 44 años, quien portaba una licencia de conducir. Mientras, el segundo hombre que quedó en el piso, traía un R-15 adaptado con un dispositivo de lanza granadas.

En la camioneta, traían además un lanza cohetes, granadas y cartuchos de distintos calibres.

La Secretaría de Marina anunció anoche que tiene “indicios” de que el líder absoluto de Los Zetas, Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca, murió durante un enfrentamiento con personal naval en la carretera de Sabinas a Progreso, en Coahuila.

MILENIO confirmó que el cuerpo del capo no se encuentra en manos de las autoridades; al parecer, la noche del domingo se presentaron presuntos familiares a reclamar y llevarse el cadáver, aunque otras versiones señalan que por la madrugada un comando entró a la funeraria para robarse los restos de El Lazca.

El Ministerio Público se presentó al lugar del enfrentamiento para realizar las diligencias y envíar el cuerpo para realizar la necropsia y tomarle huellas dactilares, así como un registro fotográfico del rostro.

De comprobarse que se trata de Lazcano, el gobierno federal habrá asestado el golpe más fuerte al narcotráfico en los dos últimos 12 años, pues culminaría la persecución del personaje más violento del crimen organizado.

De acuerdo con la institución castrense, el presunto fallecimiento de El Lazca ocurrió el domingo pasado a las 13:30, luego de que atendió denuncias ciudadanas, en las que se informaba que personas armadas se encontraban en el área de Progreso.

El personal naval que circulaba por la zona fue agredido con granadas desde un vehículo en movimiento, por la que repelió la agresión. Un elemento de la dependencia resultó herido.

“Durante este enfrentamiento, dos presuntos delincuentes fueron abatidos, asegurándose dos armas largas, un tubo lanzagranada con 12 granadas útiles, además de un tubo lanzacohetes con dos cohetes, cargadores y cartuchos para armas de fuego diversos”, puntualizó la Marina.

“Se obtuvo información de que una vez que se realizaron las primeras pruebas forenses, se alcanzaron indicios de que uno de los cuerpos pertenece a Heriberto Lazcano Lazcano, líder principal de Los Zetas”, indicó la Marina en un comunicado.

La dependencia dijo estar en coordinación con las autoridades de Coahuila y al tanto de las conclusiones de los análisis periciales correspondientes.

El gobierno de México ofrecía 30 millones de pesos por información que condujera a la captura del presunto criminal, mientras que en Estados Unidos la recompensa era de 5 millones de dólares.

Heriberto Lazcano formó parte del Ejército mexicano, al cual ingresó el 5 de julio de 1991 y causó baja el 27 de marzo de 1998.

En 1996, cuando el general Jesús Gutiérrez Rebollo fue nombrado titular del Instituto Nacional de Combate a las Drogas, empezó la historia de Los Zetas.