Nadia Lizet Rojas estuvo desaparecida 32 días. La buscaron intensamente hasta el 12 de julio, cuando la rescataron en Parque Patricios. Estaba a unas cuadras de la línea H del subte y tenía con una bolsa de residuos en la mano. Pero Nadia no volvió a su casa en Villa 20. Un equipo de Minoridad se hizo cargo de la adolescente de 14 años y la llevó a un hogar de puertas abiertas que depende de la Dirección de la Mujer, un área del Ministerio de Desarrollo Social de la Ciudad de Buenos Aires. De allí, de ese hogar, Nadia desapareció. Dicen que huyó por una pequeña ventana el mismo día que tenía que presentarse en el juzgado para una Cámara Gesell. Así se lo informaron telefónicamente desde el Consejo de Niños Niñas y adolescentes de CABA a Facundo Vicente, el abogado que lleva la causa.

“Todo es muy escandaloso”, dijeron a Cosecha Roja desde la Red de docentes, familias y organizaciones de Lugano. Hoy acompañaron a Elena, la mamá de Nadia y a Vicente a Comodoro Py para reclamar por la aparición de la adolescente. “El Estado es responsable. Entregué a mi hija para que la cuiden y la dejaron ir”, contó la mujer en declaraciones radiales.

Elena, Vicente y unas 500 personas de la Red fueron a Comodoro Py donde se les sugirió que hablaran directamente con la Dirección de la Mujer. Fueron hasta allí pero no hubo más respuesta que la desaparición de la menor.

En un comunicado de prensa difundido por la Red de Lugano, docentes y organizaciones de mujeres, denunciaron que “luego de la intensa búsqueda de 32 días que se dio acompañando fuertemente a su mamá, Elena, Nadia vuelve a desaparecer. Habiendo quedado la seguridad y resguardo de ambas a cargo de la justicia, la ausencia de Nadia se repite. No sólo en un estado de constantes amenazas a Elena, sino también prohibiciones para la comunicación de madre e hija”.

Ayer, Elena participó de una audiencia con legisladores porteños. “Luego de su aparición fueron el Consejo del Niño y de la Dirección General de la Mujer las instituciones encargadas de contenerla, pero nuevamente, y sin sorpresa, las instituciones volvieron a hallarse incompetentes”, dijo la mamá y responsabilizó al Juez Carnicoba Corral por no cumplir su función de proteger a la niña.