natalia melmann

A partir del lunes 28, Ricardo Panadero será juzgado por la violación y el asesinato de Natalia Melmann. Es el único policía bonaerense imputado que aún no fue juzgado: Oscar Echenique, Ricardo Anselmini y Ricardo Suárez fueron condenados en 2002 a reclusión perpetua más la accesoria de reclusión por tiempo indeterminado como coautores de los delitos de privación ilegal de la libertad agravada, abuso sexual agravado y homicidio triplemente calificado por ensañamiento, alevosía y en concurso de dos o más personas. Cuatro años después se les redujo la pena a prisión perpetua, lo que les permitió obtener beneficios como salidas laborales o transitorias.

La situación de Panadero –yerno de Echenique- está llena de idas y venidas. El policía había quedado bajo sospecha luego de que los forenses que realizaron la autopsia de Natalia hallaran un vello público en la región inguinal cuyos datos genéticos coincidían con los del imputado. Sin embargo, en el primer juicio, otras pericias señalaron lo contrario y el policía fue absuelto. Ese fallo fue confirmado por la Cámara de Casación, pero luego la Suprema Corte bonarense lo dejó sin efecto.

Panadero está sospechado de ser el cuarto policía que la noche del 3 de febrero de 2001 llevó a Natalia a las afueras de Miramar, a una casa del barrio de Copacabana. Entre los cuatro la golpearon, la violaron, la torturaron y la mataron con el cordón de una de sus zapatillas.

El quinto implicado es el único civil: Gustavo “El Gallo” Fernández, amigo del ex novio de Natalia, condenado a 25 años de reclusión como partícipe necesario del delito de privación ilegal de la libertad agravada y absuelto de los cargos de coautor del homicidio de la menor. Fernández hoy está en libertad. Vive en Miramar y trabaja como albañil.

El 3 de febrero de 2001, Natalia Melmann estuvo con sus amigas en el bar “La Cantina”. La madrugada siguiente fue a la disco “Amadeus” para encontrarse con su ex novio Maximiliano Marolt y se fue pasadas las siete de la mañana. Según testigos, Fernández salió tras ella. Nadie volvió a verla hasta el jueves 8, cuando una chica que paseaba con sus perros por el vivero de Miramar descubrió el cadáver tapado con ramas.

Natalia tenía 15 años, era delegada estudiantil, mejor promedio de su clase y abanderada del colegio por varios años seguidos. A veces vendía diarios para ayudar con la economía de la casa.

La familia Melmann convoca este lunes a los tribunales de Mar del Plata (Almirante Brown 2046), a las 9.