El País.-

La Suprema Corte de Justicia negó el pedido de libertad anticipada de Pablo Goncálvez. El dictamen sobrevino luego que el Fiscal de Corte, Jorge Díaz, se pronunció en contra luego de reunirse con las familias de las víctimas del homicida.

“La Suprema Corte de Justicia negó el pedido de libertad a Pablo Goncálvez. Los ministros consideraron que esto resulta imposible porque no existen signos manifiestos de rehabilitación. La decisión fue en base a informes de psiquiatra, juez y Fiscal de Corte, a pesar que Goncálvez ya cumplió dos tercios de su pena”, expresó el breve comunicado del máximo órgano judicial.

El jueves el fiscal de Corte, Jorge Díaz, se reunió con los familiares de las tres víctimas de Goncálvez: María Victoria Williams, Andrea Castro Pena y Ana Luisa Miller. Para entonces el alto magistrado había estudiado los informes del Instituto de Criminología, que tuvo una doble evaluación psiquiátrica y social. Los peritos advirtieron, entre otros aspectos, que debido a los 19 años de reclusión que llevaba Goncálvez carecía de “roce social”. Luego de juzgar todos estos elementos Díaz elevó su dictamen contrario a la libertad anticipada a la Suprema Corte, que anoche dio a conocer su resolución.

“No obstante haber cumplido el penado las dos terceras partes de la pena, atento al contenido adverso del informe siquiátrico del Instituto Nacional de Criminología, del Sr. Juez y del Sr. Fiscal de Corte, resulta imposible sostener que existen signos manifiestos de rehabilitación (art. 328 del Código del Proceso Penal en la redacción dada por la Ley N° 17.897 del 14/09/05), en virtud de ello la Suprema Corte de Justicia. Resuelve: No hacer lugar a la libertad anticipada del penado Pablo Goncálvez Gallarreta”, expresaba la resolución.

El abogado Hugo Granucci que ejerce la defensa de Goncálvez se excusó de hacer declaraciones alegando que el tratamiento que se le está dando al tema en los medios “va en contra de los principios de rehabilitación que rigen”. También se negó a precisar si, tras la negativa de la Corte, comenzará a gestionar un régimen de salidas transitorias.

Cabe recordar que desde el año 2008 Goncálvez viene solicitando salidas transitorias, pero estas le han sido negadas por el juez de la causa.

Por su parte, el ministro de la Suprema Corte Jorge Larrieux dijo a El País que este tipo de solicitudes de libertad anticipada la analizan tres ministros de la corporación judicial, quienes coincidieron en negar la medida pedida por la defensa de Goncálvez.

“Se consideró como otro caso de libertad anticipada más, no se le dio ninguna trascendencia especial, analizaron los informes que venían del Inacri, del juez de ejecución y del fiscal de Corte y en base a esos informes se resolvió negativamente”, afirmó Larrieux.

Tanto el fiscal de Corte, el juez del caso, Gabriel Ohanian, como los informes del Inacri no eran favorables a la libertad.

En caso que el abogado de Goncálvez decida pedir salidas transitorias para su cliente, lo deberá hacer ante el juez que tiene a cargo el expediente.

Días atrás El País consultó a allegados al caso en torno a la voluntad de Goncálvez al pedir su libertad y sus expectativas. “Lo preocupa la sanción social y es consciente de ello. Reconoce que su obrar de hace años puede provocar reacciones sociales, pero también cree que ha pagado sus culpas”, señaló oportunamente el informante.

Goncálvez, hoy de 42 años, cumple una condena por 30 años, la máxima prevista en el Código Penal uruguayo. Hace siete años que está casado y es padre de una niña de 7 años. Se halla recluido en una celda doble en el cuarto piso de Cárcel Central y dispone de algunas comodidades básicas, en razón de su estado de salud.

El condenado trabaja como bibliotecólogo del establecimiento carcelario, y da cursos de inglés y computación a los reclusos. Elementos que en un momento hicieron pensar que podrían pesar en su petición de liberación. (Producción: E. Delgado y R. Rossello)

La cifra
65 días es el tiempo que llevó a la Suprema Corte de Justicia, al juez de la causa, al Fiscal de Corte y al Inacri estudiar la petición.