Fernando Boccia.-

Después de una cena en familia, torturó a su esposa y la asesinó de dos tiros en la cabeza porque, según él, ella le fue infiel y quería abandonarlo. Por ello Adolfo Trotte, un exbarrabrava y otrora dirigente deportivo del club Olimpia de Paraguay, fue condenado hoy por un tribunal de Sentencia a 40 años de prisión, la pena más alta que establece la Justicia paraguaya.

Desde su muerte en la madrugada del 3 de julio del 2011, Sonia Vera, la difunta esposa de Trotte, se convirtió en la víctima más emblemática de la violencia de género en Paraguay, un flagelo que atañe a más de tres mil mujeres por mes, según las denuncias que ingresan en el centro 911 de la Policía Nacional. De hecho, el crimen motivó que los tres poderes del Estado apuraran la presentación de un proyecto de ley en el Congreso para establecer la figura penal de feminicidio.

En el sexto y último día de juicio, la presidenta del tribunal, Dina Marchuk, empezó con la argumentación de la sentencia. A la mitad de su relato, fue interrumpida por Trotte. El antiguo líder indiscutido de la barrabrava olimpista se paró y dijo que ya no escucharía a la jueza. “Es una vergüenza, parece una joda para Tinelli”, aseguró mientras abandonaba de la sala. Acto seguido, su hermano y sus hijas, quienes apoyaron a su padre desde el principio del proceso, también salieron del juicio gritando improperios al tribunal. “Esto es un circo. La jueza no habla como jueza sino como madre”, sostuvo Christian Trotte, hermano del acusado.

Luego del incidente, Marchuk terminó su argumentación. También lo hicieron los magistrados Oscar Rodríguez Masi y Julio Franco. Los jueces concluyeron de forma unánime que Trotte es una persona con una predisposición a reaccionar violentamente y de forma exagerada ante estímulos. También dijeron que, de acuerdo a estudios psicológicos, tiene rasgos que pueden poner en peligro a sus allegados. Además, la jueza Marchuk recalcó que no hay señales de arrepentimiento en él ya que hasta ahora nunca pidió perdón a la madre de Sonia Vera, Pablina Lugo. Finalmente los jueces dictaron la pena máxima, de 30 años, más otros 10 años como medida de seguridad. Este último punto fue votado de forma dividida por los jueces.

Durante el juicio, la defensa del acusado solicitó que la pena sea reducida a 10 años de prisión debido a que Trotte actuó con una “excitación emotiva”. Sin embargo, el tribunal consideró que quedó probado que hubo una premeditación del homicidio. “Por fin mi hija descansa. Que esto sirva para que todas las víctimas de violencia doméstica denuncien a sus agresores”, comentó entre llantos la mujer, quien recordó que su hija fue maltratada durante varios años por Trotte.

Según se probó en juicio, Trotte llevó a una pizzería a su esposa, su hijo y su suegra en la noche previa al homicidio. Después de comer, el entonces dirigente del club Olimpia llevó a su hijo y su suegra al hotel donde se hospedaban en la ciudad de Caacupé.Entre las 1.30 y las 2.00 de la madrugada llevó a Sonia a un lugar escampado del pueblo de Tobatí, donde la mantuvo de rodillas y la golpeó en reiteradas ocasiones con su pistola calibre 9 mm. Finalmente la ejecutó de dos tiros dentro de su camioneta Ford Explorer. Horas después, el cadáver fue depositado por el mismo Trotte en el interior de un ómnibus descompuesto en la Villa Olimpia, Fernando de la Mora, donde entrena el equipo de fútbol del club que le dio poder durante varias décadas