La división de recaptura del departamento de Delitos de la policía neuquina atrapó a Luis Aboy, el preso que se había fugado en un exhibidor de tortas. El hombre permaneció diez días prófugo, hasta que alguien llamó a la policía y dijo dónde estaba. Esa persona recibirá la recompensa de 50.000 dólares que ofreció el gobierno.
Según el subjefe de la policía Raúl Liria, la tarde del viernes el Centro de Operaciones Policiales (COP) recibió el dato preciso del lugar donde se encontraba Aboy. En poco tiempo, personal de Delitos vestidos de civil empezaron a realizar observaciones en la zona.
A las 16.25 Aboy salió de la vivienda “y de inmediato nuestro personal corrió a recapturarlo”, dijo Liria, y confirmó que el prófugo no opuso ninguna resistencia.
La casa de donde salió está a tres cuadras del lugar donde supuestamente fue sacado del mueble, tras su fuga el miércoles 18 de septiembre.
El dato de que Aboy estaba en el oeste neuquino y que no habían podido sacarlo de la provincia estuvo en mano de los investigadores desde principios de semana. El lunes a la noche les llegó el dato de que el prófugo estaría en Toma Norte, y el martes dos grupos del departamento de Delitos concretó los allanamientos autorizados por el juez de la causa, Marcelo Benavides. No lograron encontrar a Aboy, pero secuestraron armas y droga.
La del sábado fue su segunda recaptura en un año. La anterior fue en octubre de 2012 en Bariloche, y en ambas surge un factor común: el entregador.
Aboy está condenado a prisión perpetua por el homicidio de las hermanas Olga y Teresa Buamscha.
(Con información del Diario Río Negro)
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