maritaeLa chica apareció caminando por la ruta nacional Nº 34 en la provincia de Salta. Era la madrugada del 21 de enero. Estaba sola, desorientada, a 4 kilómetros del pueblo más cercano.

-Soy Nancy Natalia Robles-dijo.

Cuando la policía preguntó si sabía dónde estaba, se encogió de hombros

-No sé dónde voy ni de dónde vengo –dijo- ni por qué estoy aquí. Solo sé que estoy.

La trasladaron al hospital Melchora Cornejo de la localidad de Rosario de la Frontera. Los médicos la encontraron anémica y deshidratada, muestras de que no había comido nada durante días. Su ropa estaba limpia. Su cuerpo, débil. El gerente del hospital, Emilio Alderete, evaluó que podía padecer esquizofrenia y decidió iniciar un tratamiento psicológico. Casi quince días después, cuando todavía nadie se había comunicado con su familia, El Tribuno de Salta publicó una foto suya. Su parecido con Marita Verón dio pie a una serie de especulaciones en los medios locales.

Alertados por el rumor, distintos funcionarios viajaron a Rosario de la Frontera. Querían ver a la que podía ser Marita, la mujer más buscada del país, de cerca. También viajó hasta la ciudad Carlos Garmendia, abogado de la Fundación María de los Ángeles, encargada de combatir la trata de personas y presidida por Susana Trimarco, madre de Marita.

-Tiene un leve parecido –dijo el abogado-. Pero no es Marita. En una descripción de los rasgos podría ser posible una coincidencia, pero al ver la foto es obvio que no se trata de ella.

Las investigaciones policiales para saber quién era se orientaban hacia la provincia de Tucumán. La chica seguía sin poder aportar datos sobre familiares.

Susana Trimarco, la madre de Marita, está de vacaciones en Córdoba con su nieta. Desde allá, fue contundente:

-No es Marita Verón-dijo-. Se trata de un nuevo caso de desaparición que la policía no dio a conocer ni notificó a su familia.

Las especulaciones terminaron ayer, cuando se presentó Mari Robles y aseguró que la chica encontrada era su hija. Aportó documentación que  confirmaba que de verdad se llamaba Nancy Natalia Robles y que tenía 32 años. Mari Robles contó que no es la primera vez que Nancy dejaba su casa, sin aviso y sin ninguna comunicación. La madre, trabajadora tucumana de 55 años, relató que hace unos años fue encontrada en Buenos Aires con los mismos síntomas de desorientación. Esta vuelta,  la habían visto por última vez el 20 de enero. La denuncia la habían presentado tres días antes de ver la foto en el diario salteño.

El juez Teseyra, a cargo del Juzgado de Instrucción Formal, ordenó que se tomaran las muestras para realizar un estudio de ADN y hacer un estudio comparativo con Mari Robles. Las autoridades del hospital donde se encuentra la joven decidieron que todavía no es prudente el encuentro físico de Nancy con su mamá. En su estado emocional, dijeron, necesita preparación psicológica para enfrentar ese trance.