Somos decorado

Ante cada 8M los varones se vuelven a preguntar: ¿y nosotros qué hacemos? ¿podemos marchar? “Varones cis: somos decorado”, responde el docente y periodista Leonardo Gudiño.

Somos decorado

Por Cosecha Roja
08/03/2019

Por Leonardo Gudiño*

Leo en una red social: “La mujer decide/ la sociedad respeta/ el Estado garantiza/ la Iglesia no se mete/ el decorado se calla”. Varones cis: somos decorado.

El paro internacional feminista y plurinacional de mujeres, lesbianas, travestis, trans, bisexuales y no binaries vuelve a interpelar a varones cis: ¿qué hacer? ¿cómo participar? ¿cómo aportar?

El panorama para la jornada es claro y contundente. Las compañeras sentaron su voluntad y expresaron su intención: los varones cis no participan de la movilización.

El Colectivo de Varones Antipatriarcales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en su comunicado afirma que “históricamente los varones hemos ocupado la esfera pública, instalando al sujeto varón como aquel que engloba y secuestra el sentido político”. En esa clave sostiene que es fundamental, entonces, cuestionar ese privilegio, pensar otras formas de participación, y no convocarse a la movilización.

El acuerdo en no movilizar es generalizado. El Instituto Masculinidades y Cambio Social también es definitivo al respecto. En su comunicado no solo llaman a no marchar ni hacer paro, también insisten en “registrar que NO es NO”.

Desde el Colectivo de Varones Antipatriarcales proponen a los varones cis acercarse a “otras formas de politicidad, encontrarnos para interpelarnos desde y en los espacios íntimos”. En este punto ocurre otro encuentro: el llamado a varones cis a politizar sus prácticas y vínculos. A problematizar sus micromachismos, a traicionar la complicidad machista y abolir sus ejercicios de privilegios.

Un dato de esta época: los varones (y masculinidades) no constituyen un sujeto político articulado colectivamente. Seguramente el 7° Encuentro Latinoamericano de Varones Antipatriarcales, celebrado en Argentina el año pasado, sentó un precedente de organización y masividad.

Una respuesta pragmática para la jornada: los varones cis se ponen a disposición de lxs compañerxs para cubrirlas en sus tareas. Un dato invisibilizado: la historia política de nosotrxs, las maricas, de nuestras subjetividades y nuestros deseos, está atravesada por una distribución desigual de las tareas domésticas y del cuidado.

Un dato, una iniciativa preciosa de esta jornada: a las dos de la tarde; lxs locxs, vagxs y discas se encuentran en la plaza Roberto Arlt porque “el cuerpo se pone de muchas formas”. Esa Ranchada ilustra los entramados y subjetividades que implica este 8M. Invita a despegar la potencia de la imaginación como fuerza política de creación y organización, interrogando nuevas maneras de habitar este paro internacional feminista y plurinacional.

Varones cis, varones pakis, varones feministos: cedan y sean decorado. Sean protagonistas en burlar la corporación machista y romper con la complicidad a la que sus pares los invitan sistemáticamente. Ahí hay otro dato y otra forma de ejercitar su adhesión a las reivindicaciones de este paro: transformar las relaciones de poder, dejar de sostener al patriarcado en cada rincón de esta humanidad.

*Docente y periodista