violador serial md1

Cosecha Roja.-

“La culpa de todo esto es mía, no supe cómo vivir; les pediría perdón a las chicas pero no me da la cara, tengo vergüenza”. Esas fueron las últimas palabras de Claudio “Pepino” Napolitano antes de escuchar el fallo de los jueces. El Tribunal Oral en lo Criminal Nº4 marplatense lo condenó a 35 años por seguir, amenazar, robar y violar a siete mujeres entre 2009 y 2013. El “violador serial”, como lo llamaron los medios, ya tenía una sentencia en los noventa por otros casos de abuso sexual.

Napolitano atacaba siempre de la misma forma. Sorprendía a sus víctimas cuando caminaban por la calle o bajaban del colectivo. Las seguía y las amenazaba con un arma de fuego, les robaba dinero y el teléfono celular. Después las obligaba a acompañarlo hasta un descampado, casi siempre el mismo, donde las violaba.

En 1996 Napolitano había sido condenado a 22 años de prisión por violar a siete mujeres en la misma ciudad balnearia. Salió de la cárcel en 2003 por el beneficio del sistema 2×1 y volvió a caer diez años después. La policía lo buscaba por un abuso denunciado por una víctima en diciembre del año anterior. Al cotejar el ADN los investigadores descubrieron otros seis casos en los que Napolitano había violado mujeres en los barrios El Progreso y El Martillo.

El juicio comenzó el 7 de julio. El único procesado estaba acusado de “robo agravado por el uso de arma de fuego cuya aptitud para el disparo no fue probada en concurso real con abuso sexual agravado con acceso carnal” y de “abuso de armas y lesiones”. En la primera audiencia el abogado defensor Lucas Tornini adelantó que no iba a cuestionar la autoría de los siete casos de abuso sexual y robo investigados. Iba a poner sus energías en el monto de la pena y en la acusación por “abuso de armas y lesiones”.

Durante los alegatos la fiscal María Isabel Sánchez pidió 50 años. El defensor dijo que el pedido de la Fiscalía era inconstitucional por “excesiva”. Les pidió a los jueces Alfredo De Leonardis, Gustavo Frissore y Jorge Peralta que definan ellos el monto de la condena.

Antes de escuchar la condena, Napolitano declaró en una sala contigua al tribunal. Estaba “avergonzado y arrepentido” de sus delitos. “No sé cómo mirar a la gente, a las chicas que lastimé. Tengo un hijo y lo único que quiero es que todo esto termine”, dijo. El condenado tendrá que volver a la Unidad Penal 15 de Batán.

“Estoy muy conforme con la sentencia, que me parece ejemplar ya que los hechos fueron terribles y eso se vivenció en esta audiencia donde muchas de las víctimas tuvieron que ser asistidas en varias oportunidades”, dijo la fiscal después de escuchar el fallo.

La ONG En Red acompañó a las víctimas durante el juicio. La presidenta de la organización, Patricia Gordon, acusó a Napolitano de ser un “violador serial” y pidió una condena de “al menos cincuenta años”. “Acompañamos a las víctimas y también pedimos a la Justicia que cumpla con las leyes. Sabemos que los violadores no tienen cura, no se recuperan y siguen libres sin condenas”, dijo Gordon. Este mediodía las militantes de la ONG estuvieron en la puerta de los tribunales de Tucumán y Brown para exigir una condena “ejemplar”.

Foto: 0223

[Nota publicada el 21/7/2015]