marcha 3 de febrero de 2017Ayer el TOC 4 condenó a 15 años y 6 meses al expolicía bonaerense Gustavo Vega, por la tentativa de homicidio contra Joaquín Romero durante la represión a los vecinos que se acercaron a un tren de carga que descarriló seis años atrás en Villa La Cárcova, San Martín. En el hecho fueron asesinados sus amigos Mauricio Ramos de 16 años  y Franco Almirón, de 17.

Por los homicidios fue acusado el policía Gustavo Rey, a quien el TOC 2 absolvió por el beneficio de la duda tras el juicio oral en marzo de 2014. La Sala I de la Cámara de Casación Bonaerense ordenó en 2015 dar lugar a la apelación de la fiscalía, dejó sin efecto a la absolución y ordenó que se haga un nuevo juicio, del que todavía no hay fecha.

El ex instructor de tiro Gustavo Vega había sido condenado a 7 años porque los jueces Gustavo Garibaldi, Mónica Carreira y María del Carmen Castro no aplicaron los agravantes correspondientes por ser un funcionario público. Tras la audiencia con todas las partes que se celebró el miércoles pasado, hoy se supo que el TOC 4 resolvió condenar a Vega a 15 años y 6 meses.

Aquel 3 de febrero de 2011 Joaquín Romero estaba con sus amigos. Se acercaron al tren para ver qué había, de curiosos. Estaba retrocediendo cuando vio a Vega asomarse desde atrás de unos pastos altos, “como si fuera una cacería” recordó en el juicio.

-¡Corré!- le gritó Vega, y cuando le hizo caso le disparó por la espalda. Sintió el ardor. Los mismos vecinos lo trasladaron al hospital, y su recuperación nunca fue total. Tardaron semanas en confesarle que Mauricio “el Pela” Ramos y Franco “el Gordo” Almirón había perdido la vida.

El nuevo juicio que debe realizarse, las autoridades del Departamento Judicial de San Martín deben profundizar la investigación para dar cuenta de la responsabilidad de los superiores jerárquicos de los policías Vega y Rey, por la planificación y la ejecución del operativo violento, así como por el intento de encubrimiento posterior que intentó justificar lo ocurrido. La represión policial del 3 de febrero de 2011 comenzó una hora después del descarrilamiento del tren de carga. Se hicieron centenares de disparos contra los vecinos que se habían congregado sobre una calle paralela a las vías del ferrocarril Mitre. Los tres jóvenes habían salido de sus casas, en bicicleta, para buscar elementos reciclables para vender en el cercano predio de la Ceamse, sobre el Camino del Buen Ayre.

Los jefes del operativo que se hizo allí y que terminó con las dos muertes y el herido grave fueron el comisario el comisario Víctor Hugo Uhalde y los oficiales Amílcar Esteban Pino y Carlos Amado Silva.

El diputado nacional Leonardo Grosso declaró que “Desde el Movimiento Evita sabemos que la condena a Vega fue un logro de la lucha y la organización popular, con acompañamiento del CELS y de la Campaña Nacional contra la Violencia Institucional. Es una conquista que nos llena de fuerzas y esperanzas para seguir exigiendo que Rey sea condenado de un modo ejemplar, para que los y las jóvenes de nuestros barrios puedan sentirse -y estar- seguros”.