Eran las siete menos diez de la mañana. Milagro Sala caminaba rodeada de custostodia por un pasillo del Hospital Pablo Soria cuando vio la cámara. Apuró un poquitito el paso y aprovechó la ocasión: “Aguante la lucha de Baradel, vamos los docentes, aumento salarial para todos los estatales”.

La lider de la Tupac Amaru, presa polìtica desde el 16 de enero de 2016, fue trasladada hasta allí para ser sometida a una revisación por pedido de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que debe tomar una decisión sobre la situación de la mujer.

 

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