El deber.-

La ministra de Estado informó que se pidió al Zar antidrogas de Estados Unidos (EEUU), Gil Kerlikowske, una aclaración del informe que ubica a Bolivia en el segundo lugar de producción de cocaína en la región, asimismo, exige aclarar en base a qué datos se emitió el informe que fue publicado semanas atrás.

“Algunos países latinoamericanos están viendo la posibilidad de analizar otras alternativas frente al tema, porque la lucha contra el narcotráfico mediante la interdicción a fracasado en el mundo y EEUU y Naciones Unidas lo saben y en este momento hay una gran discusión con los líderes mundiales de que hay que tomar otro camino, uno de los caminos por ejemplo en Uruguay es, vamos a ir avanzando en la legalización de la marihuana, porque la interdicción y la represión a las bandas criminales lo que provoca es más violencia”, manifestó Dávila en rueda de prensa.

“Si hay el tema de la violencia en la lucha contra el narcotráfico se debe a que es una actividad ilegal que provoca el chantaje, que provoca el aumento de los precios, la delincuencia, que provoca absolutamente todo, es una lucha fracasada, por lo tanto si es así fracasada, muy poco tienen que decir quienes han apuntalado este sistema de lucha contra las drogas”, agregó.

En ese marco, dijo que si bien en Colombia se ha reducido la violencia por el narcotráfico, todos estos grupos de narcotraficantes se trasladaron a la Argentina México y otros países donde es posible este movimiento.

Respecto al incremento de las plantaciones ilegales de coca, la Ministra de Estado aseguró que los porcentajes son mínimos a comparación de otros países productores de la región “los cultivos de coca han aumentado en un 2%, frente a otros países y eso creo que los cultivos de coca no llegan al 1%, creo que es el 0.2% de año a año desde el 2009, cuando en otros países los cultivos de coca continúan con miles de hectáreas, pese a todos los millones de dólares que se ponen y a las operaciones conjuntas con EEUU”.

Afirmó que el Gobierno no tiene un dato exacto de cuanta coca es desviada al narcotráfico y cuanta es destinada al consumo tradicional el cual se definirá en el estudio que se impulsa con apoyo de la Unión Europea “los cultivos llegan a 31 mil hectáreas y hay que determinar de esas hectáreas se va al consumo de droga y cuanta se va al consumo interno, solo hay especulaciones, incluso del Gobierno (…), no hay un dato exacto, hay un estudio en marcha para determinar cuál es la situación de Bolivia”.

Recordó que como parte de la lucha contra las drogas, en julio se llevaron operaciones conjuntas entre Bolivia Y Brasil para ajustar el tema de la lucha contra el narcotráfico.