Nilda Garré y Rafael Bielsa.

Cosecha Roja.-

En la puerta del Ministerio de Seguridad, con las ruedas traseras sobre la vereda, estaba estacionada una camioneta verde con la bandera argentina plasmada en las puertas. Sobre ella, se leía Unidad de Traslado para la Evaluación y Diagnóstico de Adicciones. Ayer por la tarde, la ministra de Seguridad, Nilda Garré, firmó un convenio de colaboración con el titular de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar), Rafael Bielsa.

La unidad creada trasladará a las personas con problemas de adicción que no pueden ir a la cárcel. Se buscará garantizar el acceso a la salud y el respeto de los derechos, dando seguridad  sin criminalizar a los usuarios de drogas.

Cerca de las 16 horas, Garré y Bielsa ocuparon la mesa rectangular del Salón de Conferencias. En frente suyo, las sillas estaban ocupadas por diputados nacionales, secretarios y subsecretarios del Ministerio de Seguridad, funcionarios del Sedronar y de los Ministerios de Justicia y Derechos Humanos, y de Salud.

“Esto es entre todos”, comenzó la palabra de Bielsa. Hizo referencia a la necesaria colaboración del Estado Nacional y los Estados Provinciales, para “ponerse de acuerdo en como usar los recursos que tiene cada dependencia gubernamental”. Se refirió también al sector empresario. “Los laboratorios que fabrican medicamentos de prescripción legal, pero que después terminan en los sectores mas vulnerables, mezclados con alcohol, haciendo daño, también tienen su cuota de responsabilidad. No podemos hacer las cosas solos”.

Cuando fue el turno de Garré habló de las condiciones de pobreza y marginalidad en las que viven quienes necesitan ser asistidos. Resaltó que las políticas del gobierno nacional sirven para ayudarlos, porque recuperan las condiciones de equidad social y de igualdad de oportunidades. “Los tratamientos, las políticas sociales y de inclusión, y los planes que esta procurando el ministerio de trabajo de capacitación de oficios les devuelven la esperanza”.

En cuanto al accionar de la policía, contó que suele pelearse con ellos porque los procedimientos que realizan recaen sobre los consumidores de drogas. “No es el objetivo de la política, ni podemos gastar recursos humanos o tiempo en esto. Ellos me contestan que son sustancias prohibidas. Y con ironía les digo que hay tantas cosas prohibidas que se le pasan la policía”

Minutos antes de terminar el acto, cuando ambos oradores firmaron el convenio, hecho según lo previsto por Ley Nacional de Salud Mental, la ministra dijo que es necesario un cambio. “La receta tiene que ser otra. El adicto no es alguien que cometió un delito, sino alguien que necesita asistencia médica”. Y con la unidad creada, dijo, ayudará a que eso ocurra.