“Los vínculos de Marcos con la Villa 1-11-14, del Bajo Flores, están probados pero no se pueden revelar”, dijo a Cosecha Roja una fuente judicial. Marcos es Marco Antonio Estrada González, peruano, de 53 años, sospechado de estar al mando de una banda narco que opera en la villa, fue detenido esta madrugada en su casa del country La Celia, en Ezeiza. “Los allanamientos continúan y hasta el mediodía había unas 35 personas detenidas, entre ellos Silvana Salazar, la esposa de Marcos”, explicó la fuente. No sólo se allanó la casa de Ezeiza sino también la Villa 1-11-14 y varios puntos de la provincia de Buenos Aires.

Marcos, bautizado como “el capo narco más grande de la Argentina”, cayó por un kilo y medio de cocaína, repartida en unos 10 mil dosis envoltorios, más 600 kilos de marihuana. “No te olvides que esta es una causa que viene desde 2009. La investigación se realizó en cuatro o cinco etapas. Esta última ya lleva unos seis u ocho meses”, contó la fuente. El operativo está a cargo de Sergio Torres, titular del Juzgado Criminal y Correccional Federal Nro 12, el fiscal federal Juan Pedro Zoni y la Procuradoría de Narcocriminalidad (Procunar), conducida por Diego Iglesias. La detención fue realizada por personal de la División Antidrogas Urbanas de la Superintendencia de Drogas Peligrosas, Policía Federal. Además de la droga, se secuestraron armas de fuego 80 celulares, un auto, 564.000 pesos y 2.500 dólares.

El juez Torres indagará a Marcos y al resto de los imputados a partir del lunes próximo en los tribunales federales de Retiro. Desde Comodoro Py explicaron a Cosecha Roja que el tema de la extradición “es una cuestión independiente a esta causa” y que “seguramente habrá un proceso de extrañamiento o expulsión pero todavía no se está manejando esa cuestión”. Se supo que la Procunar trabaja con la Dirección de Migraciones para enviar al detenido a Perú.

A las 10 de la mañana, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, tuiteó desde su cuenta personal: “¡Detuvimos a uno de los capos narcos más importantes del país! A las 16.30 voy a dar una #conferencia de prensa”.

La primera vez que el peruano Marco Antonio Estrada González pactó con la Justicia fue en mayo de 2012: se declaró culpable de liderar una banda narco de la villa 1-11-14, en el Bajo Flores, a cambio de una pena reducida de seis años. El capo ya estaba preso desde noviembre 2007, cuando lo capturaron en Paraguay después de escaparse del país en una avioneta robada. Desde la cárcel, Marcos -como lo conocen todos en la villa- siguió manejando la venta de paco y cocaína en la villa. A poco de cumplir la condena anterior, la defensa logró un acuerdo de juicio abreviado con la fiscal de la llamada Megacausa del Paco y los abogados de los otros 32 imputados.

Su primera condena por narcotráfico había sido en 2004 pero su nombre comenzó a ser conocido cuando en octubre de 2005 ocurrió la “Masacre del Señor de los Milagros”, en la que durante una procesión murieron a balazos cinco personas, entre ellas un bebé.