bru

-¿Su hijo tiene alguna enfermedad?

-¿Mi hijo? No señor ¿por qué pregunta?

-Porque acaba de morir de un paro cardíaco.

La llamada ocurrió a las 7 de la mañana del 22 de octubre de 2011. Así recibió la noticia Mónica Yllescas: su hijo de 33 años había muerto. Lo que no le dijeron es que Néstor Ariel Cannizzo había sido golpeado brutalmente por cuatro efectivos de la Comisaría 3ra del barrio El Carmen, en Berisso.

Esta mañana, en la primera audiencia y a cinco años del hecho, la familia Cannizzo y la Asociación Miguel Bru, que patrocina el caso, dieron el primer paso. “Ni los peritos oficiales ni le perito de parte pudieron determinar que los golpes que recibió Ariel pudieran descartarse con el resultado de muerte que tuvo 12 horas después de detenido en la Comisaría”, dijo a Cosecha Roja Verónica Buscaglia, una de las abogadas de la AMB que representa a la familia Cannizzo. “Se logró el cambio de calificación, la jueza se declaró incompetente y el caso se trasladó a un juzgado criminal. Los careos entre los peritos trajeron luz en lo que fue la muerte de Ariel. Faltaron varias cuestiones en las pericias. No se hizo un estudio detallado para conocer el origen de la asfixia y se pudo constatar la presencia de hematomas internas que hablan de los golpes que recibió horas antes de morir”.

Juan Manuel Morente, el otro abogado que representa a la familia Cannizzo, contó que si bien el cambio de calificación no está firme “la jueza resolvió procedente el cambio y por ende el monto de la pena es incompetente. Ahora se tiene que sortear un tribunal oral para tratar la causa como “Homicidio agravado” por funcionario público de fuerzas de seguridad, como dice el artículo 80, inciso 9”.

La familia Cannizzo y la AMB sostienen que Ariel murió tras ser sometido a brutales golpizas por parte de los policías y lo dejaron en claro en la primera audiencia en la que se juzga al ex capitán Ricardo de La Canal, los tenientes Roberto Percuoco y Ernesto Conti, y el oficial principal José Antonio Cácere.

“Fue fundamental el testimonio de los médicos para evaluar la prueba. En principio, hubo un allanamiento ilegal. Ahora tenemos que esperar que los elementos que no fueron investigados sean investigado en lo Criminal. No es la primera vez que pasa. Le restaron importancia, había policías involucrados. El perito de parte, el doctor Ledesma, pudo determinar que si Ariel tenía sustancias tóxicas en sangre, entonces debería haberlas consumido mientras estaba detenido. Allí aparece una gran contradicción”, dijo a Cosecha Roja Rosa Bru.

*

La mañana del 21 de octubre de 2011 Ariel Cannizzo dormía en su casa, en Berisso. A media mañana, en forma arbitraria y sin orden judicial, cuatro policías de la Comisaría 3ra entraron a la vivienda a los gritos y a patadas, agarraron al joven y lo molieron a golpes. Al escuchar los ruidos, los vecinos se congregaron en la vereda y vieron cómo los policías sacaban a Ariel a la rastra, todo ensangrentado. En la seccional siguieron golpeándolo por varias horas, hasta que a la tarde lo trasladaron a un reconocimiento médico en la Comisaría 2da.

Entonces todo en la causa se volvió difuso. El médico afirmó ante la Justicia que Cannizzo se negó a ser atendido y en el informe no hay constancia de las lesiones. De allí lo llevaron a la Comisaría 4ta de Berisso donde recibió la visita de su hermano Damián. Ariel estaba golpeado, lleno de marcas y moretones, mal y descompuesto.

– Avisale a mamá que mañana, que es sábado, hay visitas. Que venga – le dijo al despedirse. Esa fue la última vez que alguien de su familia lo vio con vida.

“No pude ir. No llegué a verlo”, dijo a Cosecha Roja, Mónica Yllescas, con lágrimas en los ojos. “Yo sé que mi hijo falleció por las torturas que sufrió. Y que sean juzgados por apremios implica continuar con el encubrimiento y la impunidad. Quiero que se haga Justicia para que mi hijo pueda descansar en paz por el sufrimiento que tuvo que pasar de tanta paliza que le dieron”.

La causa llegó a juicio en un juzgado Correccional por imputación de apremios ya que el fiscal Romero denegó varios pedidos de prueba presentados por los abogados de la Asociación Civil Miguel Bru, que permitían probar la vinculación de los golpes de los policías con el deceso de Ariel.

Un informe posterior del perito de parte nombrado por la familia y la Asociación da cuenta de “lesiones evidentes en la zona de la garganta y lengua” y sostiene que la muerte pudo ser causada por las lesiones provocadas por la golpiza que recibió Ariel.

Fotografía: Gentileza Asociación Miguel Bru.