Cosecha Roja.-

La Justicia Federal de dolores detuvo a 20 personas acusados de formar parte de una banda que se dedicaba al robo y a la venta de autos. A través de un sistema de claves de uso exclusivo de la policía, la banda seleccionaba los vehículos que podían robar, los desarmaban, adulteraban las numeraciones y los documentos y los devolvían al mercado. Entre los detenidos hay dos policías en actividad y otros dos exonerados y empleados de plantas de Verificación Técnica Vehicular (VTV).

El juez Alejo Ramos Padilla, a cargo de la causa, ordenó 31 allanamientos en simultáneo que se hicieron ayer. Varios de ellos, en los partidos de Castelli, Sevigne, Ranchos, Lomas de Zamora y La Plata, se realizaron vía exhorto judicial. El resultado fueron 20 personas detenidas, entre ellas un subcomisario de la localidad bonaerense de Laferrere -arrestado en la comisaria en la que trabajaba-, un oficial de la DDI de Dolores, dos ex integrantes de la fuerza exonerados acusados de cometer delitos graves y algunos empleados de plantas de Verificación Técnica Vehicular (VTV).

La investigación, que comenzó julio pasado a partir de causas por falsificación de documentos de automóviles, estuvo a cargo de la DDI de Dolores, en la provincia de Buenos Aires. Sospechaban que gran parte de los autos robados eran restituidos al mercado con documentación falsa.

La policía, con órdenes del Juzgado Federal de Dolores, hizo seguimientos y escuchas telefónicas durante seis meses. Según contó una fuente judicial a Cosecha Roja, primero hacían una selección los autos que podían robar. La banda utilizaba claves de seguridad “que son exclusivas de la policía bonaerense”, explicó, “para ver qué autos tenían impedimentos legales”. Los preferidos eran los que tenían RPA. Es decir, aquellos a los que se les había remarcado el número de chasis.

Una vez “marcados” los autos, otro grupo se encargaba de robarlos. Después los llevaban a los talleres y le adulteraban las partes. “Sustituían motor, chasis, vidrios, patentes. Regrababan la numeración y obtenían títulos falsos para justificar la propiedad”, explicó el funcionario judicial. Después, nuevamente con las claves de la policía, verificaban que la patente coincidiera con las características legales del auto y que la combinación elegida no tuviera pedido de captura. En algunos casos, se desarmaban y se vendían las partes.

Según confirmaron desde la Justicia de Dolores, durante todo el día de hoy se siguieron haciendo allanamientos. Sospechan que aún hay miembros de la banda prófugos. Los detenidos, que serán indagados mañana, están acusados de “asociación ilícita” dedicada al robo de autos, autopartes, confección de documentación falsa y estafas a compañías de seguro.