Los hechos de violencia policial vienen ocurriendo hace un año aproximadamente en Ciudadela. Los vecinos denuncian que un efectivo de la fuerza de seguridad amenaza a jóvenes y gente mayor. La Procuraduría de Violencia Institucional remitió una denuncia para que la Fiscalía de San Martín investigue al respecto.

Santiago Asorey / Agencia Paco Urondo

policía ciudadela

Los vecinos de Ciudadela y del Barrio Ejército de los Andes denuncian que un policía bonaerense de la Comisaría Sexta de Ciudadela amenaza de muerte a vecinos y hostiga a los adolescentes de la zona. “El Perro” no excluye a nadie de sus golpes y amenazas: mujeres, chicos y gente mayor.

Entre las acusaciones, diversos vecinos afirman que el miembro de la fuerza de seguridad “arma” causas a los jóvenes del barrio y los amenaza de muerte. Además, les apunta con el revólver reglamentario. Se trata del jefe de calle de la comisaría y se hace denominar “el Perro”. Las denuncias no sólo lo salpican a él sino también a otro efectivo policial autodenominado “el Cheto”. El acompañante es reconocido en el barrio por andar con una metralleta plateada muy vistosa. Los dos miembros de las fuerzas de seguridad son señalados por actuar juntos en violentas requisas contra los chicos del barrio, donde las víctimas de los hechos de violencia institucional son golpeadas y humilladas.

Las requisas consisten en poner a los jóvenes contra la pared y pedirles a los jóvenes que se queden quietos y luego que saquen el documento de los bolsillos.  Cuando los jóvenes sacan el documento del bolsillo, “el Perro” los golpea al grito de “te dije que te quedes quieto”. El hostigamiento a los chicos del barrio es tal que ha causado reacciones de protestas por parte de los vecinos contra la comisaría.

Los nombres de los efectivos no trascendieron a la prensa ya que los agentes no usan la chapa de identificación correspondiente, y están muchas veces de civil.

Desde la Comisión Provincial por la Memoria manifestaron “preocupación ante esta situación” y presentaron un habeas corpus por una de las víctimas amenazadas. Por otro lado, la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin), dependiente de la Procuración General de La Nación, remitió a la Fiscalía de Instrucción N° 7 de San Martín una denuncia para ser investigada. También solicitaron la protección de una de las víctimas de los acosos.