Cosecha Roja.-

Es conocido como el sicario más joven de Perú. Le dicen “Gringasho” por el pelo rubio. Tiene 17 años y lo acusan de matar a más de diez personas. Alexander Manuel creció en las calles de Trujillo al lado de sus padres. Cuando cursaba tercero de primaria abandonó las aulas y se dejó seducir por las armas. Guiado por su tío Roberto Carlos Gutiérrez Guzmán, alias “El Soli”, se inició en el mundo del hampa.

A los 12 años ingresó a “Los Malditos de Río Seco”, una organización de extorsionistas y secuestradores que sembró el terror en el departamento de La Libertad. Junto a los miembros de la banda, “Gringasho” se entrenaba matando perros en los arenales de Wichanzao. En poco tiempo el adolescente estaba preparado para extorsionar comerciantes y matar por encargo.

Su nombre se conoció en los medios de comunicación por el crimen de Deysi García Tooth, una joven embarazada que desapareció en diciembre 2009. Meses después, sus restos aparecieron envueltos en bolsas de plástico y sepultados dos metros bajo tierra. Luego se supo que “Gringasho” le disparó en la cabeza porque quería liberar a su primo, David Loyaga, de la responsabilidad de ser el padre del hijo que esperaba Deysi.

En septiembre del 2010, el joven sicario se entregó para aclarar ese crimen. Llevaba el pelo pintado de negro y negaba ser “Gringasho”. Pocos meses después el poder judicial lo absolvió por falta de pruebas.

En febrero de 2011, se disfrazó de reciclador y a la salida de una tienda les disparó a tres integrantes de la banda ‘Los Clavos del Alambre’. Dos días después, “Gringasho” apareció dando sus descargos a la policía. El test de absorción atómica determinó un 70% de probabilidades de que haya disparado un arma de fuego durante esos días, pero otra vez quedó libre por falta de pruebas.

Más tarde, la policía lo recapturó junto a otro menor conocido como “Pelao Gerson”. Ambos tenían armas de fuego. Luego de cumplir dos tercios de su condena lo liberaron. Su felicidad duró apenas diez minutos: afuera lo esperaba la policía con una orden del Cuarto Juzgado de Familia de Trujillo. El sicario más joven de Perú fue sentenciado a seis años de prisión por formar parte de la banda de extorsionadores “Los Malditos de Río Seco”.

Todo parecía indicar que “Gringasho” permanecería tras las rejas hasta julio del 2018, pero su historia tomó otro rumbo. El 28 de abril de 2012, se fugó junto a otros tres menores del Centro de Diagnóstico y Rehabilitación Juvenil de Trujillo. Su hazaña desató un escándalo en los medios de comunicación. Los ciudadanos se quejaban de la precariedad y la falta de seguridad del recinto de rehabilitación.

Un equipo especial de la Policía Nacional de Trujillo allanó viviendas en el distrito de La Esperanza, ante la sospecha de que serían refugios de“Gringasho” y de los otros tres adolescentes. Pocas veces en la historia de Perú se habían desplegado operativos tan intensos y elaborados para ubicar y detener a un adolescente.

Mientras cientos de policías seguían su pista, el menor continuaba jugando al gato y al ratón. Desde la clandestinidad, le concedió una entrevista a un medio de comunicación. “Sabía que me iban a matar”, dijo “Gringasho”. Su abogado, Henry Cisneros, aseguró que integrantes de la banda “Los Pulpos” planeaban asesinar a “Gringasho” en el reclusorio.

El amor le jugó una mala pasada. “Gringasho” viajó a Lima para encontrarse con Yasmy Marquina, la chica de ojos claros y medidas perfectas que le robó el corazón y lo llevó a cometer graves errores. El seguimiento que la policía le hizo a Yasmy dio sus frutos: el sábado 12 de mayo los encontraron juntos en un hotel del distrito de Independencia.

Después de la captura de “Gringasho”, su novia le declaró su amor: “Jamás pensé que, a esta edad, me enamoraría  como una niña. Lo mejor es que él comparte mis sentimientos. Es demasiado hermoso”, escribió en su Facebook.

Una vez que pasó por los exámenes médicos de ley, fue llevado a la sede de Requisitorias dela Policía Nacional. Fuentes policiales indicaron que en los próximos días el asesino más joven y polémico de los últimos meses en Perú será llevado a la ciudad de Trujillo.

(Síntesis de los medios peruanos)