La Prensa.-

Sin remordimientos y a sangre fría, una adolescente hondureña de 15 años planificó y llevó a cabo el asesinato de su propia madre. Según las investigaciones preliminares de la Policía, la menor no actuó sola, buscó apoyo en su novio de 17 años, le planteó el plan y el pasado sábado por la noche cometieron el espeluznante crimen que mantiene conmocionados a los habitantes de esta ciudad.

Ana Brenda Boden Guzmán (40), viuda de un ciudadano estadounidense, con quien procreó tres hijos, se oponía a la relación sentimental de su única hija: la menor de 15 años con un adolescente de 17. Los jóvenes tenían un noviazgo a escondidas desde hace seis meses.

Las discusiones por aquella relación llevaron a la menor y a su novio a matar a puñaladas a Boden Guzmán. El crimen lo perpetraron la noche del pasado sábado en la vivienda del barrio Buena Vista, adonde residían madre e hija.

Según la Policía, los menores inventaron una historia sobre el ataque, pero en menos de 24 horas su plan se vino abajo y ante las evidencias y nexos que confirmaban su participación en el hecho no tuvieron más remedio que confesar el brutal crimen.

A las 3:00 pm del lunes en el barrio San Ramón de Siguatepeque, al centro de Honduras, era detenido el novio de la joven. Después de un interrogatorio, el menor confesó cómo asesinaron a aquella mujer cuyo pecado fue impedir el romance entre ambos. Horas después era detenida la hija de la víctima cuando se encontraba en el velatorio de la que fue su madre.

La DNIC (Dirección Nacional de Investigación Criminal) en coordinación con el Ministerio Público y Medicina Forense ayer inspeccionaron la vivienda adonde se escenificó la tragedia para recabar nuevas evidencias. Los hechores fueron trasladados a centros de menores en Tegucigalpa y San Pedro Sula. Se les acusa por los delitos de parricidio y homicidio.

En el salón de la iglesia El Legado, en Siguatepeque, era velado el cadáver de Boden Guzmán.

Familiares y amigos la acompañaron, guardaron silencio ante la tragedia, las lágrimas evidenciaban el dolor y solo oraban. A las 3:00 pm sepultaban a aquella mujer que solo buscaba lo mejor para su hija, pero que en el intento fue asesinada.

Los hechos

A las 10:00 pm del sábado, la Policía recibía una llamada en la que les alertaban que en el interior de una vivienda del Barrio Buena Vista habían asesinado a una mujer. Un equipo se trasladó al lugar y efectuaron el levantamiento del cuerpo que presentaba seis heridas de arma blanca, dos en la cabeza, dos en el cuello y dos en la espalda.

“Ingresamos a la escena, adonde se encontraron varios indicios y muestras de sangre. No se tenía información de lo ocurrido, la hija de la fallecida era la única que daba la versión de que un hombre vestido de negro había ingresado a la casa y fue quien asesinó a la madre; pero había varias cosas que no eran claras. Se trabajaba en varias hipótesis y las fuimos descartando. Fue hasta el lunes que logramos la conexión con los jóvenes”, informo Roberto Carlos García, jefe de la DNIC en Siguatepeque.

Los agentes no daban crédito a la versión de la muchacha porque no encontraron indicios de que las puertas de la casa fueran violentadas. Otro detalle que llamó la atención de los agentes fue que el novio presentaba heridas en su mano derecha.

Cuando el novio fue detenido relató los detalles de lo ocurrido antes y después del asesinato de Boden Guzmán. Ambos dijeron que el rechazo a la relación sentimental provocó que la hija planificara la muerte de su progenitora, porque estaba cansada de los maltratos y regaños que le daba por andar con el joven. La fiscal de la Niñez en Siguatepeque remitió ayer a los dos menores a centros de rehabilitación, adonde permanecerán mientras se desarrolla un juicio por el asesinato de Boden Guzmán.

Llega hijo de EUA

El lunes en la noche llegó a Siguatepeque uno de los hijos de la fallecida, él reside en  Estados Unidos. Se presentó a la Policía para dialogar con su hermana y conocer detalles de la tragedia. Por más de una hora conversó con la joven en la estación policial. Ayer a las 9:30 am, en compañía de las autoridades, se trasladó a la vivienda que su padre, un norteamericano, construyó años atrás.

En la inspección se mostró colaborador con las autoridades, aunque su mirada era triste, tomó fuerzas para recorrer junto a ellos la vivienda adonde creció junto a sus dos hermanos.

En el lugar, las huellas de sangre aún estaban en el piso de la sala de la residencia, lugar adonde fue asesinada su progenitora.

Los forenses inspeccionaron toda la casa, buscaban pruebas científicas, huellas y evidencias para documentar el caso. Había desorden producto del forcejeo que se escenificó al momento del ataque. La casa desde el día del asesinato permaneció cerrada y bajo custodia de las autoridades.

Una hora después abandonaron el lugar. En su relato a las autoridades, el hijo de Boden Guzmán afirmó que unas horas antes de la muerte había hablado con ella. Contó que le estaba arreglando los papeles para llevársela a Estados Unidos, porque sabía que había problemas en la casa por la relación de su hermana con un novio, pero que nunca imaginó que la asesinarían.

“Era una familia unida”

Nadie de los que conocieron a Ana Brenda Boden Guzmán da crédito a su trágica muerte.

La mujer, catalogada como una cristiana ejemplar, junto a su esposo educaron bajos sólidos principios religiosos a sus tres hijos.  “La familia tenía dos años de congregarse en la iglesia, era una familia unida, sólida. Quedamos sorprendidos con la noticia porque la hermana Ana siempre fue un ejemplo, ella servía en la iglesia y participaba en todas las actividades”, refirió Alfredo Guzmán, pastor de la iglesia El Legado, adonde asistía la víctima junto a sus hijos. Los feligreses tampoco podían asimilar el espantoso crimen. “Ella siempre se preocupaba por sus hijos, era bien responsable, venían como familia y no nos imaginábamos que algo así pudiera ocurrir. Es lamentable, es un doble dolor, una tragedia”, dijo una de las hermanas de la iglesia.

Aterrador testimonio

Éramos compañeros de colegio y empezamos un noviazgo. Pero comenzamos a tener problemas porque su mamá no estaba de acuerdo que anduviera conmigo, y pasaban en pleito.Siempre discutían, mi novia se estaba cansando de la situación porque siempre la regañaba y por eso pensó en hacer algo para evitar que nos separaran.

Desde hace una semana ella me propuso el plan para matar a la mamá porque ella no quería que siguiéramos juntos, se oponía a que fuéramos novios. Nos comunicábamos por medio de mensajes, y el sábado fue el día que se hizo todo.  Ella me había dicho que iba a ir a la iglesia, que me dejaría la puerta de la cocina abierta, que el perro lo iba a encerrar para que no me atacara y que yo me quedara escondido en la casa de su abuela donde están los carros viejos y que me avisaría cuándo debía entrar a la casa.

Me mandó un mensaje en el que me decía “voy para la iglesia, voy a dejar la puerta abierta, si la puerta está cerrada es que allí está ella”. Me pidió que no me dejara ver mucho para que el perro no me ladrara.

Estuve buen rato esperando en la casa de la abuela, hasta que ella me dijo en un mensaje que estaba afuera. Yo entré y me escondí en el baño para esperar que la mamá saliera. Allí estuve por un buen rato. La señora estaba acostada en su cuarto, queríamos que saliera para agarrarla en la sala, pero no salía. Entonces empezamos a tirar cosas del baño para que al escuchar los ruidos ella saliera. Así fue, yo tenía listo un cuchillo y cuando bajó la atacamos. De la fuerza que usamos se me quebró el cuchillo, y por eso me herí de la mano. La señora estaba herida, pero seguía viva y fue cuando mi novia se fue y trajo otro cuchillo y fue cuando ella murió.

Yo me fui de la casa y fue cuando mi novia avisó diciendo que un hombre había matado a su mamá”.