La marca de un borcego en el cuerpo: ¿qué hizo la Policía con Matías Nicolás Ruiz?

La versión de la Policía salteña fue que el peluquero tucumano, de 27 años, corría desnudo por la calle y cayó desplomado. Los videos muestran otra cosa: Ruiz fue detenido, demorado y tardaron una hora en llamar a una ambulancia. Las huellas en su cuerpo hablan de violencia.

La marca de un borcego en el cuerpo: ¿qué hizo la Policía con Matías Nicolás Ruiz?

Por Natalia Arenas
22/07/2021

La tarde del martes 13 de julio fue atípica para Juan Carlos Ruiz. A contramano de su cotidianidad, se acostó a dormir una siesta en su casa de Salta. “Cosa extraña, soy una persona super activa”, diría una semana después. A las 16.30 lo despertó el sonido del teléfono. Era una de sus hijas, desde Tucumán. Estaba llorando.

-Papi, nos acaban de avisar que Nico está muerto en el hospital San Bernardo.

Juan Carlos saltó de la cama, se vistió y salió. Desorbitado. Hoy lo recuerda como si le hubieran echado “un baldazo de agua fría”.

Cuando estaba llegando a la casa de su hijo vio en la calle una cantidad de policías que no alcanzó a contar. “Como si hubieran muerto una decena de personas”, dice. El que había muerto era Matías Nicolás Ruiz, de 27 años.

La muerte de Nico fue contada en los titulares de los medios de Tucumán y Salta, porque él era tucumano pero vivía en la provincia vecina. Las noticias contaron que un peluquero había aparecido corriendo desnudo por la calle Santa Fe, en las inmediaciones del parque San Martín, de la ciudad salteña, se había desplomado y muerto. Después se supo que era Matías Ruiz. “Pero le decimos Nico”, dijo Juan Carlos a Cosecha Roja.

En realidad, Matías Nicolás no se desplomó en el piso. De acuerdo a las cámaras de seguridad de la zona, la Policía de Salta lo detuvo a las 6.50 de la mañana. “De forma completamente impertinente, lo redujeron por un término de una hora y 10 minutos aproximadamente”, dijo al diario La Gaceta el abogado de la familia de Ruiz, Martín D’Andrea.

“Se llama al Servicio de Emergencia y Atención Médica a las 7.45 y el móvil llegó a las 8.18. El enfermero advirtió que Matías ya no tenía signos vitales, que su cuerpo ‘parecía un muñeco’”, completó D’Andrea.

¿Por qué la Policía, al ver a una persona desnuda en medio de la calle, una fría madrugada de julio, tardó casi una hora en llamar a una ambulancia?

Esta semana el medio Qué Pasa Salta difundió un video en el que se ve el momento de la detención. Matías Nicolás está sentado en el piso, desnudo y esposado, rodeado de policías. “No me hagan nada, por favor”, les pide.

“Yo personalmente traté de reconstruir lo que pasó con mi hijo esa madrugada fatídica”, dice Juan Carlos a Cosecha Roja. “Mi hijo pedía ayuda. Lo dijo: necesito auxilio. Y pidió clemencia por su vida. Pero los policías hicieron caso omiso”.

D’Andrea coincide: “Un video exhibe y demuestra que Matías pidió clemencia ante el personal policial. También estaba ubicado en tiempo y espacio. Decía: Me llamo Matías Ruiz”.

Los resultados de la autopsia estarán la semana que viene. La querella considera que hay pruebas suficientes para que la muerte de Matías Nicolás sea considerada un homicidio. Además de las imágenes de las cámaras de seguridad, las fotos post mortem muestran lesiones en el cuerpo del joven. “(Matías) Ha tratado de luchar por su vida. Tiene dislocadas las dos muñecas. Las extremidades del cuerpo evidencian que uno de los policías lo ha pisado. Tiene la marca de un borcego”, dijo D’Andrea en La Gaceta.

La fiscala penal Ana Inés Salinas Odorisio, integrante de la Unidad Fiscal que investiga la muerte de Ruiz, imputó este miércoles a cuatro policías como autores del delito de homicidio culposo. A uno de ellos, Héctor Matías Rodríguez, además, le imputaron vejaciones en concurso real. Rodríguez es el policía que presionó su borcego contra Ruiz.

En la fundamentación de la acusación, Salinas Odorisio dice que los policías interceptaron y demoraron a Ruiz con una “actuación exagerada para el contexto en el que se desarrollaban los sucesos”.  Sobre Rodríguez, detalla: “De los registros fílmicos analizados, se puede observar que hace uso inadecuado de la fuerza e inobservando los principios de congruencia y proporcionalidad, sitúa su pie derecho sobre el cuerpo de la víctima, empujándolo para luego, con el mismo pie, apoyarse y presionar sobre su humanidad”.

La fiscala también imputó a cuatro operarios del SAMEC por la demora sin causas en el envío de la ambulancia. “Cometieron descuido u omisión de las diligencias debidas e impuestas por la prudencia, cuya observancia y previsión, hubieran prevenido el resultado acaecido”, dice la acusación.

Matías Nicolás era el último hijo de una familia numerosa: tres varones y tres mujeres tuvieron Juan Carlos y su ex esposa. De muy jovencito, salió de su Tucumán natal en busca de una salida laboral en su pasión: la peluquería. Armó un bolso con un par de calzoncillos y medias y se fue a Buenos Aires.

“Hizo toda su carrera ahí. Aprendió de los mejores e hizo todos los cursos que podía. Se iba perfeccionando día a día”, cuenta su padre.

Después volvió al NOA. Se instaló en el norte de Salta, alquiló un local y se puso una peluquería. Hace un poco más de un mes se había mudado a la ciudad de Salta. Alquilaba un local a cuatro cuadras del centro. Estaba orgulloso de su proyecto. Le iba muy bien.

“Todavía no puedo discernir qué es lo que pasó. No lo puedo asumir”, dice Juan Carlos y le cuenta a Cosecha Roja que algunxs testigxs recibieron amenazas. Él cree que por parte de la Policía de Salta. Quiere que el Ministerio de Seguridad de la Nación se involucre. “Hay un montón de casos como estos en Salta. El ministro (por la ministra Sabina Frederic) debe presionar, porque es responsable de la seguridad de las 24 provincias”, dice.

Y también le habla al Ministerio de Justicia de la Nación: “Hay una Justicia que no trabaja para la justicia. Si tengo que ir a Buenos Aires, lo voy hacer, no le tengo miedo a nadie, a ningún ministerio ni despacho, ni mucho menos a ningún ministro”, dice.

La familia de Matías Nicolás Ruiz convocó este martes a una manifestación en la plaza céntrica 9 de Julio, de Salta, y en la Plaza Independencia, de Tucumán, para pedir justicia por el crimen. Se les sumaron vecinxs y organizaciones de derechos humanos.

“Yo le pido a la población que se involucre. No puede haber más un ciudadano que pierda la vida en una muerte tan horrenda”, dijo Juan Carlos.

Natalia Arenas