Proceso Digital.-
Los ministros de Seguridad y de Gobernación de Honduras y Guatemala, Pompeyo Bonilla y Héctor López, respectivamente, expresaron hoy interés en adaptar la tregua entre pandillas que ha permitido bajar los crímenes en El Salvador.

Tras reunirse con su homólogo salvadoreño, David Munguía Payés, Bonilla y López elogiaron la disminución de asesinatos registrada en El Salvador como producto de la tregua e indicaron que estudiarán el proceso para ver si lo implementan en sus países.

Honduras, El Salvador y Guatemala integran el Triángulo Norte de Centroamérica, considerado como una de las zonas más violentas del mundo, principalmente por la actividad de pandillas, narcotraficantes y otras organizaciones delictivas.

El propósito de la reunión celebrada hoy en el Ministerio de Seguridad en San Salvador fue que Bonilla y López conocieran “de cerca este proceso que estamos desarrollando en El Salvador y que ha dado como resultado la contención y la baja” de los asesinatos, afirmó Munguía Payés en rueda de prensa junto a sus homólogos.

Reiteró que el promedio diario de homicidios en El Salvador ha bajado de catorce a entre cuatro y cinco desde marzo pasado como producto de la tregua entre las pandillas Mara Salvatrucha (MS) y Mara 18 (M18), anunciada el 20 de ese mes por el obispo castrense, Fabio Colindres, quien proclamó que él medió para lograr ese pacto.

La MS y la M18 son las principales pandillas que operan no sólo en El Salvador, sino también en Guatemala, Honduras y otros países de la región, además de maras más pequeñas, que suman decenas de miles de miembros.

Bonilla comentó que el resultado de la tregua en El Salvador “es significativo” y que “es una experiencia que merece replicarse”.

“Celebramos el éxito que ha tenido El Salvador en salvar vidas, hay menos homicidios”, resaltó el ministro hondureño.

López coincidió en que la tregua entre las pandillas salvadoreñas “es digna de ser estudiada y de ver cómo se puede adaptar”, pues muestra “una tendencia muy marcada hacia un cambio completo” en “la incidencia criminal”.

Ambos ministros también destacaron la importancia de que en este esfuerzo participen las iglesias y organizaciones civiles.

El Gobierno salvadoreño ha rechazado acusaciones de que en realidad negoció con la MS y la M18 para que dejaran de cometer asesinatos, aunque reconoce que facilitó la mediación del obispo.

El presidente salvadoreño, Mauricio Funes, ha expresado que la tregua entre pandillas podría ayudar a bajar la tasa de homicidios en su país, que es de 68 por cada 100.000 habitantes, según informes de Naciones Unidas.

En Honduras el año pasado se registró una tasa anual de homicidios de 86.5 por cada 100,000 habitantes, según cifras del estatal Comisionado de los Derechos Humanos.

El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, aseguró la semana pasada que en sus primeros cuatro meses en el poder los homicidios bajaron 18% en su país, donde en 2011 se registraron más de 6,000 homicidios, según las estadísticas oficiales.

Por otra parte, Munguía Payés indicó que en la reunión también se analizaron acciones conjuntas para combatir la criminalidad en los tres países, entre otros asuntos de cooperación en seguridad.

El ministro hondureño reiteró que se investigan los asesinatos de periodistas cometidos en su país en los últimos años y que en el caso más reciente, el de Alfredo Villatoro, coordinador de noticias de la radio HRN de Tegucigalpa, hay varias hipótesis.

Villatoro fue secuestrado el pasado 9 de mayo y asesinado de dos disparos en la cabeza el día 15.

Foto: Cristian Póveda