El escritor Macerlo Figueras trabaja en una biografía del Indio Solari. Lo acompañó al concierto de Olavarría. Estuvo al lado del escenario, en el hotel con el resto de la banda. “El Indio tiene una tristeza atroz”, dijo hoy en una entrevista en Radio del Plata.  “Lo que intuíamos”, dijo, “es que se iba a utilizar cualquier cosa que pasase  – y no digo por mínima que fuese porque ninguna muerte es mínima – para caerle encima al Indio por una larga serie de facturas que un sector de la sociedad acumuló durante años y no consiguió pincharle ninguna solapa”.

figueras“Estando ahí a un costado del escenario, yo veía esa montonera que el Indio vio y  fue lo que lo llevó a parar inmediatamente el recital. Había un grupo grande de chicos en un sector del escenario, bien pegado al escenario, que parecían muy tambaleantes, con un movimiento muy vacilante, medio imparable. Armaban una especie de remolino. El temor era que alguno de ellos se fuera desplomando y lo pisen los otros. Entonces se sufrió mucho todo, se paró, se esperó que sacaran a los que parecían caerse. Todo el concierto seguimos mirando ese sector, temiendo que volviese a pasar”.

“Cuando terminamos con esto, apenas llegamos al hotel, yo empiezo a buscar wifi y empeizo leer las cosas que circulaban en las redes sobre la cantidad de muertos, sobre un niño de 5 años, sobre un chico de 14. Ahí me quise morir yo. No lo podía creer. Y después como todo el mundo empiezo a darme cuenta de que todo lo dicho no era así. Y más significativo aún: que las dos únicas víctimas mortales no tenían nada que ver con ese sector que tanto nos preocupó a nosotros durante el concierto. Una murió trombosis que, aparentemente, es una causa de muerte relativamente natural. Si a estas dos personas les pasaba lo mismo una hora y media después, estarían lejos del predio”.

“No quiero hablar en nombre del Indio. Lo que me consta del Indio en esta circunstancia es que está con una tristeza atroz por la muerte de estas dos personas, por más que hayan muerto por causas que no echarían las clases de sombras que quieren echarle a él encima, no dejan de ser dos personas muertas y eso es una tragedia en sí misma”.

“No creo en una conspiración a la House of Cards o ese tipo de cosas.  Lo que sí, yo tenía el temor desde antes y el Indio lo intuía también. Por eso estuvimos hablando con la gente para que tuviese cuidado porque había una especie de caldo que se estaba armando como para tratar de explotar cualquier cosa que pudiese llegar a pasar”.

“Después de la forma en que la prensa oficialista interpretó el rechazo a los popes de la CGT el martes pasado, después de una marcha tan maravillosa como la del miércoles – y hablo con conocimiento  porque estuve ahí- que eso se transformara en las feminazis de conducta depredadora de la que habló Patricia Bullrich. Y de repente esta otra expresión popular, la tercera en la semana: cientos de miles de personas en la calle, que no son precisamente fans del gobierno. De repente puede pasar algo manipulado por la prensa para hablar mal de todo tipo de expresión”.

“No digo que tiraron dos muertos. Son cosas que pasaron. Trescientas mil personas o más son tres ciudades de Olavarría dentro de Olavarría. Podrían haber nacido sniños: había gente embarazada, pasan todas las cosas que pasan en un día en una ciudad”.

El concierto fue organizado por la misma productora con la que el Indio viene trabajando desde hace años con buenos resultados. En 2005 empezó con los conciertos solistas y estamos en 2017. Conciertos con centenares de miles de personas.  Ha tenido confianza en sus productores.

“Ha una cosa que me preocupa mucho. Yo tengo la sensación de que hoy martes por la mañana estamos a punto caramelo de un caso de libro de texto de psicosis colectiva. Hagamos esta pregunta ¿Qué pasó realmente? ¿De qué estamos hablando? Hubo dos personas que murieron adentro del predio durante el concierto y por las razones que dijimos. No por una avalancha. Esto es lo que pasó. Todo lo demás es que estamos hablando de lo que podría haber pasado. También es atendible, no digo que no tengamos que hablarlo. Pero estamos como en una cosa muy parecida a Cromañón: me refiero al grado de reacción de histeria de los medios y redes sociales y todo el tiempo tengo que hacer el esfuerzo de retornar a la realidad” El 90% de las cosas que se menciona son cosas que han pasado en la época los Redondos y que siguen pasando. Y que ahora se hablan como si fuera la primera vez”.

“Desde el llano, lo que me pregunto es que clase de cacheo tenés que hacer para que la gente no entre con pastillas, por ejemplo. ¿Tenés que desnudar a 300 mil personas? ”

“De las puertas para adentro del estadio la mayor parte de la responsabilidad tiene que ver con la organización, a pesar de que ahí  que tiene que estar Defensa Civil Lo que ocurre de las puertas del predio para afuera la organización en principio no tiene responsabilidad. Ni de cómo llegan, ni mucho menos sobre las rutas que son nacionales”.

“La verdad es que no te lo puedo decir ahora (si el Indio va a anunciar que no toca más en vivo). La única certeza que hay es que se está esperando que la justicia actúe y que quede en claro qué pasó con las pruebas que tienen que estar. Si te entrás a enganchar con cada cosa que dicen, porque ahora estamos en medio de un ejército de opinólogos que demuestran un desconocimiento supino no solo del artista y de su público. Ayer escuché decir que “si lo hacen en seis estadios”, y si decí eso es porque no conocés al público del Indio. Si lo hacés 6 estadios, va a ir el mismo público seis veces seguidas y si cerrás las puertas rompen todo. Las recetas que sirven para  aplicarse a otros artistas no funcionan con el Indio. Este fenómeno es sui generis, único en el mundo. Hay que entenderlo para que las cosas funcionen mejor”.

“Lo que intuíamos es que se iba a utilizar cualquier cosa que pasase  – y no digo por mínima que fuese porque ninguna muerte es mínima – para caerle encima al Indio por una larga serie de facturas que un sector de la sociedad acumuló durante años y no consiguió pincharle ninguna solapa”.