Por Redacción – www.elpuntocritico.com

Organizaciones como IANSA y el Comité Oxford para la Lucha contra el Hambre (Oxfam) calculan que cada día ingresan a México 2 mil armas, “lo que multiplica exponencialmente la violencia al aumentar el número de criminales, asesinos, secuestradores y narcotraficantes”, advirtió el coordinador del PT en el Senado, Ricardo Monreal Ávila.

Se calcula además, que existen entre 15 y 20 millones de armas ilegales circulando por territorio nacional, además de los 5 millones 500 mil armas autorizadas por la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena), es decir que por cada arma legal, existen al menos 4 ilegales.

Cabe mencionar que el tráfico de armas está estrechamente vinculado con otras actividades ilícitas como el tráfico de drogas y el terrorismo; esto debido a que son actividades que generan enormes ganancias. Esta distribución por el territorio nacional cobra especial relevancia debido a que muchas ejecuciones se han cometido con armas introducidas ilegalmente en el país, cuya procedencia y fabricación es principalmente de los Estados Unidos.

La industria de armas en los Estados Unidos representa un negocio de más de 30 mil millones de dólares al año, el poder económico y político de las empresas fabricantes e importadoras es inmenso, tal es el caso que su injerencia en el gobierno llega a los más altos niveles.

Según lo asegura el coordinador petista, existen estudios que revelan, que el 80 por ciento de las armas y municiones usadas por el crimen organizado en México provienen del vecino país de norte, “gobierno que ha sido renuente y omiso en cuanto a tomar medidas”, afirma.

Monreal Ávila, explica, que generalmente estas armas y municiones son adquiridas a tan sólo unos metros de la frontera, donde se estima, existen más de 12 mil establecimientos donde pueden ser compradas de manera legal. “Por ello, el gobierno norteamericano desde hace años ha estado comprometido con esta temible industria y sin el menor interés de legislar en contra de sus intereses”, acusa el legislador.

El tráfico y el uso de armamento exclusivo de las fuerzas armadas representan actualmente 15 por ciento de los delitos federales cometidos en todo el país, lo que equivale a un promedio de mil 200 ilícitos relacionados con tráfico o posesión de armas.

Podrían elevarse multas contra quien contrabandeé, comercie o adquiera armas

A propuesta del coordinador del PT en el senado, Ricardo Monreal Ávila, se analiza en comisiones una iniciativa que pretende elevar las sanciones y multas en contra de quienes fabriquen, comercien o adquieran cualquier tipo de arma de fuego o explosivos  de manera ilegal.

La iniciativa tiene por objeto combatir el tráfico de armas, estableciendo sanciones de entre 4 y 20 años de prisión y de 40 a mil días de multa para quien adquiera armas, municiones y explosivos sin comprobar la procedencia legal de los mismos. Asimismo, aumenta a entre 10 y 30 años de prisión y de 200 a mil días de multa para quien las fabrique y/o comercie dichos artefactos.

Para los traficantes de armas de uso exclusivo del Ejército se sugiera una pena de entre 10 y 60 años tras las rejas. En caso de que el ilícito sea cometido por un servidor público tendrá que pagar la multa máxima establecida en mil días de salario mínimo vigente, y la destitución del empleo o cargo que desempeñe.

A través de una reforma a la Ley Federal de Armas de Fuego, el coordinador petista asegura que el tráfico ilícito de armas y municiones, es amenaza primera de la seguridad nacional, además de que es “uno de los ejes de la violencia que desangra al país”.

Monreal Ávila, destaca que debido a la venta ilícita de armas, los últimos años han sido los más violentos en nuestro país, siendo que a la fecha la guerra contra el narcotráfico ha cobrado la vida de cerca de 60 mil civiles y ha provocado el aumento acelerado de conflictos armados, criminalidad y terrorismo de las que dijo “dificultan cada vez más el retorno a la paz”.