miss mrihuana

República.-

Desde hace seis años se celebra en Brasil el concurso Miss Cannabis. En esta última edición el premio fue un viaje a Uruguay, el país que reguló el mercado de la marihuana. La ganadora entre 35 candidatas fue Juliana, una chica que consume cannabis como parte de su tratamiento contra el cáncer.

El 21 de marzo llegó a Uruguay con un acompañante que es quien iba con ella a barrios peligrosos a las “bocas” a procurarse el canabbis para su tratamiento. Recorrió paseos clásicos de Uruguay y también se entrevistó con gente que lleva adelante clubes de cannabis, visitó plantaciones y se entrevistó con integrantes del Centro de Estudios de Cannabis del Uruguay.

Miss Marihuana no es un concurso de belleza en sí, sino un acto de militancia que mezcla el concepto elegante de una ‘Miss’ con marginalidad en torno al tema de marihuana, explican los organizadores del evento.

Y en efecto la historia de Juliana pudo más que la belleza física de muchas participantes del concurso realizado desde el sitio web “Hempadão”. Juliana en Uruguay habló con usuarios de marihuana que la consumen con fines medicinales.

Indicó que busca fortalecer su experiencia para que haya confianza en el uso medicinal de esta planta. Juliana también llegó a Uruguay con la expectativa de “comprender cómo la reglamentación funciona fuera del papel de la Ley”, según declaró en el país norteño.

Juliana contó su historia y cómo luego de ser diagnosticada con cáncer debió esperar 70 días para iniciar un tratamiento.

“Durante ese tiempo vi crecer mi tumor exponencialmente y desesperada busqué cualquier terapia alternativa que me pudiese ayudar. Usé varias plantas recomendadas como anticancerígenos, como aveloz y janaúba, hasta que llegué a la marihuana. Leí mucho sobre ello y hablé con mucha gente que estaba empapada en el tema”, contó.

Explicó que cuando comenzó el tratamiento de quimioterapia empezó a sentir las secuelas de ello.

“Tenía falta de apetito, pero no podía perder peso, la marihuana me daba hambre y también percibí que me ayudaba a dormir. Después tenía náuseas y la bendita planta me ayudó. Además de esto los remedios me causan trastornos hormonales y la marihuana también me calma, me deja en paz y con una sensación de tranquilidad y relajamiento”, contó. Juliana explicó por qué la elección del acompañante que llegó con ella a Uruguay.

“Durante mi tratamiento algunas veces no quedé en condiciones físicas y psicológicas de ir al encuentro de los traficantes para comprar marihuana. Entonces esta persona que ahora me acompañó hacía ese recorrido por mí, para que yo estuviera bien”, explicó.

Solución a la uruguaya

A instancias del senador del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil, Cristovam Buarque, se presentó un estudio en el Parlamento de aquel país sobre la situación legal de la marihuana. Los consultores del Senado de Brasil Denis Murahovschi y Sebastián Moreira Junior concluyeron que el futuro de la marihuana en Brasil es su legalización controlada, con regulación de todo el proceso (de la producción y el comercio a la compra y el consumo de drogas), que quedaría sujeto al control y fiscalización del Estado.