Cosecha Roja.-

En 1989 un chico de 14 años intentó fugarse del Seminario Menor de Paraná. Unos días antes le había contado a su director espirtual y actual arzobispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari (foto), que el cura Justo José Ilarraz abusaba de él y de otros compañeros. El confesor le dijo que estaba “mal interpretando” los gestos del cura, que hacía eso porque “los quería”. El ex seminarista, que hoy tiene 37 años, declaró ayer en la causa en la que se investiga a Ilarraz, acusado de abusar de más de 50 niños entre 1984 y 1995.

El ex seminarista hoy tiene 37 años, es policía y carga con dos intentos de suicidios. Ayer declaró ante el juez de Instrucción Nº3 de Paraná, Alejandro Grippo, y detalló los abusos a los que eran sometidos los chicos.

Una tarde de diciembre de 1989, contó, el cura lo llevó junto a otros dos niños en un Renault 12 a un departamento en el centro de la ciudad. Ahí abusó de él y lo obligó a ser testigo de los abusos a los demás. Esa noche, el chico intentó escaparse del seminario. Estaba cansado que el cura se metiera en su cama, lo besara y lo manoseara. O de tener que ser testigo de estas escenas.

Un tiempo antes, había denunciado al cura pedófilo ante su confesor: Juan Alberto Puiggari, actual arzobispo de Paraná. La respuesta fue que estaba “mal interpretando” los gestos de Ilarraz, que hacía eso porque “los quería”.

El cura Justo José Ilarraz se desmpeñó como prefecto del Seminario Menor de Paraná entre 1984 y 1995. Durante este período abusó de más de 50 chicos menores de 14 años. Si bien los ex seminaristas que declararon en la causa lo inculparon directamente, la justicia no ordenó su detención y el cura se encuentra libre a la espera de ser citado a declarar.