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Marisa Herrera es doctora en derecho e investigadora del CONICET. Formó parte de la redacción del Código Civil y Comercial de la Nación. Hoy en el octavo plenario del debate por la legalización del aborto expuso la perspectiva de derechos humanos con el que fue pensado el código. Acá algunos de sus pasajes más destacados:

1.

“Yo voy a demostrar en estos siete minutos cómo el Código Civil y Comercial de la Nación no sólo no prohíbe la legalización del aborto en la Argentina sino que además acompaña, reafirma y consolida un debate como éste.”

2.

“El Código Civil que hicimos está construido desde los derechos humanos como columna vertebral. Por eso mismo los artículos 1 y 2 hablan del derecho civil constitucionalizado humanizado. Es consecuencia de un montón de legislaciones que son un orgullo para la Argentina a nivel legislación: matrimonio igualitario, identidad de género y técnicas de fertilización asistida. Es un código diferente que nos interpela a los civilistas y nos hace repensar prejuicios que se tenían en materia de derecho civil. Está dirigido a una sociedad multicultural, que implica un código laico y la protección al más débil.”

3.

“En términos de reproducción asistida, el Código Civil habla de la posibilidad de revocar el consentimiento hasta antes de la transferencia. La ley 26862 permite la revocación, habla de donación de los embriones y conservación de embriones. Si puedo hacer todo esto es obvio que el embrión no es persona. El embrión no es un argentino con derechos.”

4.

“Este Código Civil es un código rupturista, que acompaña un montón de ampliaciones de derechos, es un código que habla para el más vulnerable, que habla de igualdad real y sustancial, del concepto de empoderamiento, fortalecimiento y emancipación, de prevención, de autonomía de libertad, especialmente de las adolescentes, por eso el famoso artículo 26 tiene tanto peso en los proyectos de ley que estamos analizando.”

5.

“Recordando a Rodolfo Walsh: “Un intelectual que no comprende lo que pasa en su tiempo y en su país es una contradicción andante y el que comprendiendo no actúa tendrá un lugar en la antología del llanto pero no en la historia viva de su tierra”. Nuestro Código Civil es historia viva de su tierra, es consecuencia de una mirada profunda de los derechos humanos, tiene cara de mujer, y por eso no es un código que solamente acompaña, sino que es un código para una sociedad más igualitaria, más democrática y claramente más humana con las mujeres.”