Cosecha Roja.-

En el hospital de Rafaela, provincia de Santa Fe, no lo podían creen: la mujer tenía un hacha incrustada en la cabeza. Estaba consciente, pero no lograban sacársela. Así, con el arma todavía en el cráneo, la trasladaron al hospital Cullen, en Santa Fe.

Allí lograron identificarla: era Eva Malagueño, de  36 años. El agresor, alcanzó a decir la mujer, había sido su exmarido. El hombre se apellidaba Hoyos y tenía 46 años. La policía comenzó a buscarlo, pero ya no estaba en los lugares que solía encontrar.

Los vecinos contaron que antes del ataque habían escuchado gritos: un hombre y una mujer que el lunes durante la madrugada discutían con fuerza en una casa de la calle Pascual Brusco al 2200.

Según informó la policía a los medios locales, desde una semana antes el hombre tenía una orden de exclusión del hogar dictada por el Juzgado de Familia de Rafaela. La pareja tenía cuatro hijos en común.

El hachazo fue a las 6: un ruido seco y luego silencio. La mujer salió enseguida rumbo al hospital.  Murió a las 9 de la mañana.

Horas, después, al mediodía, el cuerpo de un hombre apareció colgado de un árbol en un camino rural. La policía no tardó en identificarlo: era Hoyos, el asesino de su mujer.