Deonisia-Lopez

 

El lunes 18 de diciembre, mientras la Gendarmería comenzaba a reprimir en la Plaza de  los Dos Congresos, Deonisia López Solís, de 44 años, le decía a su hijo mayor que iba a salir. Ella es vendedora ambulante y los últimos meses venía mal con el trabajo. Varios controles policiales le habían impedido vender los collares y artesanías en la zona de Corrientes y Libertador, donde solía estar. Planeaba aprovechar el día e irse hasta la calle Avellaneda para buscar precios y comprar mercadería. Su hijo recuerda que salió a media mañana y desde entonces está desaparecida.

“A mi me contaron al otro día que ella no había vuelto. Fuimos a los hospitales de la zona y después a hacer la denuncia en la comisaría 9° de Almagro”, contó a Cosecha Roja Juana López, su hermana. “Desde entonces no tuvimos novedades”, agregó. La última vez que la vieron llevaba una remera azul francia, jean azul, zapatillas nike negras con violeta, cartera negra y campera azul con puntitos blancos.

“Desde la desaparición de mi hermana fui todos los días a la comisaría para saber qué se sabía, pero me encontraba con que no habían avanzado en nada”, contó López. “Ya pasaron tres meses y no hay ningún indicio”. La familia organizó tres cortes de calles pidiendo por su aparición.

El jueves 22 volverán a realizar una marcha. La convocatoria es en Callao y Corrientes a las 7. “Yo me ilusiono con que alguien la reconozca por las manifestaciones, por las fotos y que ella va a aparecer. También sé que si hubieran accionado antes no tendríamos que estar ahora pidiendo para buscarla”, dijo López.