Reconocimiento a Rosa Tarlovski, una luchadora por los derechos humanos

La vicepresidenta de Abuelas de Plaza de Mayo será distinguida hoy por el Senado de la Nación con la “Mención de Honor Juana Azurduy de Padilla” por su trayectoria en la defensa de los Derechos Humanos.

Reconocimiento a Rosa Tarlovski, una luchadora por los derechos humanos

Por Cosecha Roja
12/09/2019

La vicepresidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Rosa Tarlovski, será distinguida por el Senado de la Nación con la “Mención de Honor Juana Azurduy de Padilla” por su trayectoria en la defensa de los Derechos Humanos. La mención es una iniciativa de la Senadora Nacional por Santa Fe, María de los Angeles Sacnun. La ceremonia se realizará hoy las 15 en el Atrio del Congreso.

Rosa Tarlovski de Roisinblit nació el 15 de agosto de 1919 en Moisés Ville, Santa Fe. Se graduó de obstetra en la Universidad del Litoral más tarde y ganó por concurso el cargo de “Partera Jefa” de la Maternidad Escuela de Obstetricia de Rosario. Se casó con Benjamín Roisinblit, con quien tuvo una hija: Patricia Julia.

En octubre del 78 su hija Patricia, su yerno y la hija de ambos (de apenas 15 meses) fueron secuestrados por la dictadura militar. Patricia Julia estaba embarazada de 8 meses de su segundo hijo, niño que nacería en cautiverio.

La familia logró recuperar a la hija de Patricia. Su bebé recién nacido fue apropiado y entregado a XXX. En 2000 Guillermo Pérez Roisinblit fue recuperado. Su verdadera identidad fue restituida cuatro años depsués.

Rosa fue querellante en el juicio que dio por probado el Plan Sistemático de Apropiación de Niños durante la última dictadura militar y también es querellante en la causa que investiga la desaparición forzada de su hija y su yerno en la Regional de Inteligencia de Buenos Aires.

El mes pasado Rosa cumplió 100 años. “Una mujer enorme, con un coraje inigualable y un temple único. Transgresora, valiente y abnegada, lleva 42 años luchando por los Derechos Humanos de todas y todos. Feliz”, excribió su nieto Guillermo. Cuando el diario Página 12 le preguntaron a Rosa cuál era su mayor deseo: “Saber dónde está mi hija”, contestó. “Si ella estuviese conmigo no tendríamos esta reunión. No pasaría nada, estaría en mi casa, a lo mejor tejiendo para mis nietos y bisnietos”.