Por si todavía no lo conocen: @foier es el experto en redes al que Carolina Aguirre denunció por golpeador y Malena Guinzburg por abuso.
Por si todavía no la conocen: La Cope es una humorista que hace tiras en internet, y que la semana pasada se volvió Trending Topic luego de una campaña de memes e insultos en su contra.
Un día después de la nota de Carolina Aguirre, un pequeño ejército de trolls intentó hacer una campaña de desprestigio contra ella en las redes sociales. Arrobaron a decenas de periodistas y a cualquiera que hubiese compartido el texto de la denuncia. Los intentos de desprestigiarla no llegaron muy lejos: unas horas después aparecieron denuncias de otras mujeres por acoso, maltrato y abuso sexual. En twitter se corrió un rumor: que el denunciado había escapado del país, al parecer rumbo a Israel.
El #FoierGate en las redes siguió unos días más. Un tuitero con miles de seguidores insultó a las víctimas -y lo justificó en nombre de la ‘incorrección política’- y otros se trenzaron en pequeñas guerras virtuales.
Lo que vino después fueron los memes contra La Cope, una dibujante con medio millón de seguidores en Facebook que suele reírse de los estereotipos y remata varios de sus chistes con un deseo: tomar birra en la vereda.
Muchos de los que compartieron la carta de Carolina Aguirre se subieron al tren del bullyng virtual contra La Cope. Y fue ella misma -que al principio se tomó los memes con humor- quién advirtió cómo los mensajes que recibía eran cada vez más violentos.
Hoy hizo una recopilación de los insultos que recibió: deseos de violación, muerte, acusaciones de feminazi, etc. Mucho de lo que se escribió en esos memes son las cosas que @foier hacía en el mundo real.
Esta fue la respuesta de la dibujante, que no necesita mayor preámbulo:
“En los últimos días recibí más comentarios violentos, descalificadores y machistas que en toda mi vida. También me pidieron que no exagere y que me lo tome con humor.
No hay una línea fina entre el humor y la violencia. Es bastante amplia. Una cosa es ser gracioso y otra cosa es ser un forro pelotudo. Y el problema es que vos te creés un vivo bárbaro, pero sos un fracasado.
Mi meme favorito es en el que están Martin, La Cope, Bart y Nelson sentados en la vereda tomando una Quilmes. El de ivan eht nioj me hizo reír mucho también.
Los insultos que le escribiste a un dibujo mío en paint y tus mensajes hostigadores, machistas, racistas y homofóbicos, no me causaron gracia.
Me hicieron llorar. Lloré un rato porque me hiciste sentir que vos sos “la gente”. Y si toda la gente es como vos, estamos muertos y enterrados. Me hiciste sentir miedo de salir a la calle. De mirar mi celular.
Lloré un rato hasta que apareció la gente hermosa que me rodea. Gente enorme como no creo que conozcas. No estarías así de enojado. Me acordé de lo feliz que soy. Y me acordé, sobre todo, que los violentos como vos no le ganan a las pibas como yo. Y que, aunque haya un montón como vos, nosotros somos más.
No tenés idea cuánto intenté que no me afecten tus palabras, sobre todo sabiendo lo chiquitito que sos. Quise ignorarte hasta que desaparecieras, como en ese capítulo de la casita del horror de los simpson (ya que estamos) en el que los carteles cobran vida y Lisa y Paul Anka cantan “Just don´t look”. En otras palabras, a la gilada ni cabida.
Pero vos no sos un cartel. Ni siquiera sos la gilada. Vos sos un troll. Sos un violento de internet. Sos lo más bajo que podés ser. Y no me tomo todo este trabajo porque seas importante, sino porque cuando lo hago, aparecen todas las personas que valen la pena. Y son muchas más que vos. Esas personas a las que insultaste con la misma vehemencia que a mí cuando me quisieron defender.
El amor que yo recibí este fin de semana vos no lo conocés. No tenés idea. Gente que amo. Gente que admiro. Gente que no conozco y no me conoce y me mandó tanto afecto que todavía no lo pude procesar bien. Me bancaron personas que si te favean un twit te hacés pis encima. El feminismo que tanto odiás y querés destruir me contuvo y protegió, como hacemos siempre. Y les estaré siempre agradecida, porque gracias a ellos estuve sonriendo todo el fin de semana.
Y lo más lindo de todo, me regalaron muchas cosas. Sobre todo: birra. Birra, birra, birra. No sabés lo bien que se siente escribirlo después de tanto leerlo.
Y vos seguís ahí solo, triste y enojado, insultando gente que no conocés.
Peleándote en los comentarios de algún diario.
Y yo no tengo por qué comerme tus amenazas, aunque vos no seas más que un resentido atrás de una computadora.
Hay que gritar si alguien nos acosa en la calle. Pedir ayuda si tenemos miedo. Denunciar si nos agredieron. En eso creo.
Así que esto es para vos que me decís que no sos machista, solo que mis dibujos te dan cáncer porque soy una concha seca. A vos que para criticar lo que yo hago tuviste que atacar a otras mujeres.
Me bardeaste tanto por las cosas que escribo acá que mejor uso las mierdas que me mandaste vos. Son tan lindas que seguro me bajen la publicación.
No creo que conozcas Pez. Y si conocés, no entendiste nada. Pero ayer una chica me recordó una canción que dice “siempre hay gente de mierda pero no por ellos yo voy a parar”. Y es por eso que mañana vuelvo con la programación habitual, dibujando lo que a mi se me cante el culo, para la gente a la que le gusta. Como siempre.
Vos seguila si querés. Aca estamos.
Ah, no tengo OSDE. Te diría que saques eso de tus insultos, pero ni siquiera lo inventaste vos.
Te mando un beso grande,
y birritas en la vereda.”
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