Desde SiPreba (Sindicato de Prensa de Buenos Aires) denunciaron que al final de la marcha de #NiUnaMenos, la policía reprimió a manifestantes y a las periodistas que documentaban la represión en la Catedral de la ciudad de Buenos Aires.
“Dos compañeras de la Secretaría de Mujeres y Géneros del Sipreba -Ana Laura Torna, su secretaria y Nancy Acosta- fueron afectadas por gases que venían de La Catedral, tuvieron que correr y meterse en el subte junto con otro grupo que también desconcentraba”, dijeron desde el sindicato en un comunicado.
Unos minutos después, una trabajadora de Télam, Alelí, fue agredida mientras intentaba sacar fotos a unos 50 policías que se encontraban detrás de las vallas de la Catedral.
“Pasé por la plaza porque iba hacia el subte, era un nube irrespirable, se escucharon un par de tiros al aire y el chorro de agua que iba y venía”, contó la trabajadora en las redes sociales. “No dude en sacar la cámara de la mochila y sumarme a los fotógrafos que allí estaban pero me pegué al cercado para tomarles las caras de cerca. En la foto se ve que tengo una bolsa en un mano y lo que no se ve es que la otra tengo mi cámara”.
“Cuando me acerco a la valla tomo la primera foto, la segunda y a la tercera siento que me apuntan con un aerosol de gas pimienta a diez centímetros de mi boca. En el momento sentí ahogo y un ardor profundo pero lo seguí para tomarle fotos. Luego se volvieron a escuchar tiros al aire, desconozco el tipo de proyectiles. Intentamos una vez más enfocarles las caras y por segunda vez me tiran gas. Nos retiramos a las corridas cuando llegaron más patrulleros en contramano desde el Obelisco”, denunció en un comunicado difundido por el sindicato.
“Este ataque por parte de la Policía”, dijeron desde la organización, “es un claro intento de cercenar la libertad de prensa. Exigimos el inmediato esclarecimiento de los hechos y la separación de los responsables materiales y políticos de la represión”.