Era el fin de semana largo de Semana Santa. Iván Cuello y Nahuel Chaparro decidieron aprovecharlo y hacerse una escapada hasta San Pedro. Buscaron un camping lindo y con buen precio. Así llegaron al Camping América. Pagaron, se instalaron y unas horas después los echaron por “sobrepasar los límites de convivencia”. Iván y Nahuel se habían dado unos besos.
“Porque nuestros besos no son delito, porque nuestros besos no están mal, porque nuestros besos tampoco volverán jamás al closet por eso es que decidimos denunciar públicamente al Camping América”, posteó Iván en su Facebook. Allí detalló la escena de la que él y su pareja fueron víctimas: “Nunca imaginamos que horas después de haber pagado y encontrarnos ya instalados es que la persona encargada del lugar se iba a acercar hacia nosotros a decirnos qué podíamos hacer y qué no en el camping”. “Claramente no tenía que ver con normas de convivencia del lugar sino con una serie de requisitos homofóbicos, en donde besarnos estaba censurado, abrazarnos también”, escribió.
La persona que se acercó les dijo que habían recibido varias quejas de otras familias de cómo se estaban besando. “No éramos la única pareja besándose pero sí la única pareja gay haciéndolo”, aclaró Iván. Ellos pidieron saber quiénes se habían quejado, pero les dijeron que y se habían retirado.
La pareja discutió con el encargado y luego tomó sus cosas y se fue. Inició una denuncia en el Instituto contra la Discriminación que será elevada al INADI. Y presentará una demanda contra el camping.
Después de la viralización de la situación, el Camping América sacó un comunicado que lleva la firma de su presidente, Sergio “Tachuela” Bargues. En él aclara que “todos son bienvenidos, siguiendo los lineamientos sociales y barriales de carácter inclusivo fomentados por nuestra institución. Respetamos la diversidad de género, religión o etnia”. Y agrega que “un beso, un abrazo una caricia u otros gestos de amor y cariño no son mal vistos. Cuando rozan lo sexual u obsceno en zonas comunes y compartidas, y se producen quejas de las demás familias, se realizan las advertencias pertinentes para la buena coexistencia. Si las mismas no son cumplidas y continúan con la misma actitud, provoca el desenlace ya conocido. Este incidente no tiene relación con que sea una pareja del mismo sexo. Esto sobrepasó los límites de convivencia”.
En su Facebook, Iván repudió los dichos de Bargues y dijo: “Si (Bargues) hubiera estado presente no entiendo por qué, como autoridad no se acercó a dar la cara”. “Me parecen actitudes cobardes y, sobretodo, que nos hayan echado sin mediar palabra alguna para que podamos expresar nuestro punto de vista”, agregó.