Fotos: Facundo Nívolo
El #Día1 el acontecimiento llegó por las pantallas: los chats y mails empezaron informar medidas por el coronavirus y “se cancela” se convirtió en la frase de la semana. Ya estábamos en el baile: 17 periodistas de 7 países de Latinoamérica compartían el inicio de la Beca Cosecha Roja y vivimos juntxs el cambio de hábitos, los besos con el codo, el alcohol en gel como aliado. Hace una semana, cuando nuestro director Cristian Alarcón daba la inauguración con una clase magistral, costaba creerle:
-El periodismo nos pone a prueba y vamos a experimentar una serie de cambios en nuestras vidas que nos hará repensar las prioridades. No es una excusa para el buen periodismo. Es un desafío.
Todas las clases de la Beca estuvieron atravesadas por el coronavirus y vimos cómo la perspectiva de géneros, el arte, las herramientas digitales y las técnicas narrativas pueden, y deben, estar presentes para abordar la pandemia.
Fueron cuatro días plenos de estímulos: un seminario de “Violencia de género y crímenes de odio” con Ileana Arduino, taller de “Narrativas para la era digital” con Sebastián Hacher, “Laboratorio de Periodismo Performático” con Lorena Vega y la presentación de Fernando Rubio y Sol Dinerstein, tutores de ese laboratorio.
“Me estoy deconstruyendo y los aportes que recibí fueron claves para mirar una nueva sociedad que se configura. Pero también para poner en juego esos conocimientos en mí trabajo cotidiano, donde cubro violencias, gatillo fácil y víctimas del dolor”, dice el becario Lisandro Tosello (diario La voz del interior de Córdoba) desde la home office que instaló en su living para enviar las notas a la redacción.
Para muchxs lo más novedoso de la Beca fue ensayar un proyecto de performance. Y entender que el periodismo en escena no tiene nada que ver con una ficción teatral. A Beatriz Santos Da Cruz, periodista freelance todo terreno que llegó de San Pablo, Brasil, el Laboratorio le abrió un universo: “Fue una experiencia inolvidable, en tan poco tiempo creo que logro ver mejor las relaciones entre periodismo y arte”.
En medio del Encuentro alguien hizo un chiste:
-Somos como el animalito de la “Era de hielo”, los lugares cierran después que vamos.
Es que antes de la advertencia de la Organización Mundial de la Salud de reducir el contacto social, hicimos un tour feminista. Visitamos la muestra “Políticas del deseo: para todes, tode” y nuestra guía fue Kekena Corvalán: “Presten atención porque esta es la muestra feminista más grande que se haya hecho”, dijo la curadora de lujo que nos llevó por cuatro pisos del Centro Cultural Kirchner.
Asistimos a la inauguración de la “Kermés del día después” y la directora del Museo del Libro y la Lengua, María Moreno, jugó con nosotres a tumbar latas con frases machistas. El el Centro Cultural Recoleta hubo una edición especial de Anfibia Podcast con El deseo de Pandora: Leila Mesyngier y Julieta Greco entrevistaron a Ana Larriel, activista corporal que nos ayudó a pensar los prejuicios alrededor de los cuerpos gordos. El Recoleta no fue la excepción. Cuando salimos, cerró.
El broche fue una charla íntima con Eleonor Faur y Ana Minujín (madre e hija), que como no pudieron estrenar su proyecto de Periodismo Performático en Fundación PROA -cerrada contra el coronavirus- se acercaron para contarnos su proceso creativo y la investigación periodística que hicieron para hablar de los vínculos de hijas y madres en la cuarta ola feminista.
“Los que trabajamos en medios tradicionales impresos estamos tan acostumbrados a la típica pirámide invertida que nos cuesta romper lo establecido”, dijo Sonia Obregón del diario Trome (Perú). Para ella, el encuentro de la Beca fue la puerta a un mundo sensible. El conocimiento de sí para llegar al conocimiento de otres: “Entendí que antes de escribir tenemos que pensar en un tema que verdaderamente aporte, investigar sobre el tema, aprender a consignar la información para ver cuáles son las escenas y los personajes”.
Al coronavirus le tenemos respeto pero no nos paraliza, por eso hoy comenzaremos con la primera de las clases de la Beca a través de nuestro aula virtual. Estamos preparadxs para dar la batalla: nuestro arma es el mejor periodismo.
