Foto: Lara Otero
La Legislatura porteña aprobó hoy, por 50 votos a favor, siete en contra y tres abstenciones, el proyecto de ley de adhesión al Protocolo para la Atención Integral de las Personas con Derecho a la Interrupción Legal del Embarazo (Protocolo ILE). El proyecto fue presentado en febrero de este año por la Campaña Nacional de la lucha por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
El protocolo es una herramienta para garantizar los derechos de las personas gestantes que, ante un embarazo producto de una violación o que ponga en riesgo su salud integral, pueda abortar.
“Llegamos tarde”, se escuchó en muchos de los discursos de lxs legisladorxs que hoy votaron a favor. Hace casi 100 años que el aborto es no punible por causales. Quienes se opusieron a aprobar este proyecto, se estaban oponiendo a un derecho ya adquirido. Lo dijo Ofelia Fernández, del Frente de Todos, en su discurso: “¿De verdad piensan que somos capaces de ir para atrás en vez de ir para adelante? ¿Que vamos a permitir que condenen a las más perversamente vulneradas? De ninguna manera. La ILE ya es un derecho. Tiene que ser una realidad”.
Durante el debate circularon algunas cifras: en la Argentina, cada 3 horas una menor es madre. El nuevo protocolo también explica que un embarazo en una niña menor de 15 es en sí mismo un riesgo para la salud.
“Para muchos vale menos que una probeta el cuerpo de las niñas, de las adolescentes, de las mujeres cis o trans, de las personas gestantes”, dijo Laura Velasco, del Frente de Todos.
Entre quienes votaron en contra se repitieron los discursos vetustos que se vienen repitiendo desde 2018, cuando se debatió el aborto legal en el Congreso de la Nación. El legislador Guillermo González Heredia, de Vamos Juntos, contó, por ejemplo, que en su juventud su esposa actual quedó embarazada y que muchos le decían que aborte. “Tomé la decisión de continuar con el embarazo y hoy puedo decir que es la mejor decisión que tomé en mi vida”, dijo sin sonrojarse.
Unas horas después, Victoria Montenegro, del Frente de Todos, pidió que “se deje de subestimar a las mujeres con respecto a las decisiones que tomamos sobre nuestros cuerpos. “Escuché a algunos diputados decir que están dispuestos a llevarnos de la mano, no necesitamos que nos lleven de la mano”, dijo.
Alejandrina Barry, del Frente de Izquierda, dijo que “la pandemia no puede ser una excusa para la demora. La pandemia vino a recrudecer las situaciones de violencia en las mujeres, tanto en lo que hace a los femicidios como en la clandestinidad para acceder a un aborto”.
Hasta hoy, Buenos Aires era una de las ciudades que no había aprobado el protocolo. Ahora sólo faltan las provincias de Tucumán, San Juan, Formosa, Santiago del Estero y Corrientes.