Semana.-

Leder Correa Cobo se encuentra privado de la libertad en la cárcel de Villanueva, en la ciudad de Cali. Sólo ha recibido el apoyo de sus compañeros de patio.

El hambre y el robo de una caja de caldo de gallina mantienen en la cárcel a Leder Correa, un humilde campesino de 32 años quien viajó desde el municipio de Argelia (Cauca) a la capital del Valle para reclamar un supuesto subsidio de Acción Social. Casi dos meses después lo único que ha recibido es un ‘canazo’.

Leder, quien se está recluido en la cárcel de Villanueva no se resigna a permanecer en este lugar pues aunque reconoce el delito de hurto, cree que no se justifica que esté privado de su liberad desde el lunes 23 de abril. Ese día los vigilantes del supermercado La 14 lo capturaron al encontrarle la caja con el saborizante con la cual quería engañar al hambre.

“Es un hurto famélico”, le reclamó este jueves en la audiencia de revocatoria de la medida de aseguramiento el abogado defensor Juan Carlos Millán al juez que lo mantiene en la cárcel. Pero el reclamo no fue escuchado ya que el funcionario judicial pospuso la audiencia para el próximo 22 de junio.

El único apoyo que ha recibido Leder desde finales de abril lo obtuvo de algunos de los presos de la cárcel quienes llamaron al abogado Millán para que lo ayudara a salir. Eso sí, sin ningún pago. Ellos consideraron injusto que un hombre esté encerrado por el robo de un caldo de gallina.

Hoy los presos del patio Uno A, recolectan 128.000 pesos, que es la indemnización que solicita el supermercado, para retirar el cargo.

El abogado Millán considera que existe una desproporcionalidad en el delito. “Atendiendo que este no es grave, no hubo violencia, el objeto no se perdió y el delito no tiene pena mayor de dos años”.

Ante la injusticia, el abogado va a solicitar el cambio del funcionario judicial ya que considera que este esta “contaminado” por la trascendencia que ha tenido el caso. “Por 30.000 pesos, el juez concluyó que es un sujeto peligroso para la sociedad”.

La tragedia ha acompañado a este campesino pues una mina antipersona le estalló en una pierna y le dejó una lesión. Por eso se fue hasta la ciudad de Cali únicamente con el pasaje de ida y con la idea de regresar con los bolsillos llenos luego de que le entregaran indemnización prometida.

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