Por lo bajo cuentan que el día de su cumpleaños el jefe de Policía de Córdoba, Julio César Suárez, estaba enojado. “Me cagaron el día”, repetía. Ese 15 de agosto de 2014 el periodista Dante Leguizamón había denunciado el violento ingreso de la fuerza en el barrio Los Cortadores, donde un mes antes la policía había asesinado a un joven y había fraguado un falso enfrentamiento.
—Yo mismo me voy a encargar de vos —le dijo el jefe al periodista por teléfono.
También lo atacó desde la cuenta oficial de Twitter de la Policía. “Dante Leguizamón no mienta más, no confunda a la gente”, le escribió. Y firmó el mensaje: “Crio. Gral. Julio César Suárez. Jefe de Policía”. Esa noche el periodista no durmió. Durante la madrugada los patrulleros pasaban por el frente de la casa con las sirenas encendidas.
Al día siguiente denunció las amenazas y el comisario pidió disculpas. “Esto no se resuelve con un pedido de disculpas”, contestó el abogado querellante Claudio Orosz. Tres años y medio después, la causa llegó a juicio: desde el lunes el ex jefe de la Policía de Córdoba estará en el banquillo de los acusados.
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Suárez se convirtió en jefe de la fuerza en diciembre de 2013 después del acuartelamiento de la policía. Los agentes pedían aumentos en los sueldos y venían de un “descabezamiento” producto del narcoescándalo.
El nuevo jefe asumió con la consigna de legitimar el accionar de la fuerza en las calles: “La ciudad es nuestra”, dijo entonces. Llenó de agentes los barrios populares de la capital, reforzó los controles vehiculares e implementó una nueva modalidad de exponer a los detenidos para los medios: el corralito. Él mismo en persona encabezaba los operativos.
Desde la asunción de Suárez aumentaron los casos de violencia policial. En siete meses hubo siete casos de gatillo fácil. El jefe explicó que entre el “accionar legítimo” de un policía y el “exceso” hay una “línea muy delgada”.
En julio de 2014 la policía asesinó a Fernando“Gueré” Pellico en el barrio Los Cortadores. Unos días después los vecinos denunciaron que la Policía volvió para “provocar”. Entraron al barrio “con verdugueos y prepotencia” y allanaron una casa en la que supuestamente vendían drogas. Leguizamón estaba cubriendo el operativo para Canal 10 de la Universidad Nacional de Córdoba. El periodista contó que cuando llegó el móvil los policías abandonaron el barrio.
En el programa también hablaron de Gueré Pellico y Maxi Peralta. Los dos jóvenes fueron asesinados por la Policía, quienes montaron un escenario de falso tiroteo. Ese día Suárez entró al estudio. A los gritos exigió hablar con Leguizamón. Después lo amenazó por teléfono.
Suárez volvió a ser noticia en 2017. En ese momento ya no era más jefe de Policía. En plena calle se agarró a trompadas con Ramón Frías, otro ex jefe durante la gestión de José Manuel De la Sota.
“¡Dos tipos que manejaron un ejército de más de 20 mil hombres armados, persiguiéndose en la calle con sus camionetas 4×4 y cagándose a trompadas!”, escribió en ese entonces Leguizamón. Ese día el periodista supo que había tenido razón al preocuparse cuando veía los patrulleros que pasaban por su casa y denunció al jefe de la Policía de la provincia. Ahora volverá a cruzárselo, pero en tribunales.
