Cosecha Roja.-
Marita no tuvo tiempo de apretar el botón antipánico el 15 de abril: su ex entró al jardín maternal en el que trabajaba, le clavó un cuchillo en el cuello delante de los niños y escapó. Media hora después la policía lo detuvo con el arma en la mano. Hoy la Justicia lo declaró imputable y deberá afrontar un juicio oral. Según el fiscal el hombre “comprende la criminalidad de sus actos”.
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Hacía un año que Marita se había separado. El día que él la golpeó, para ella fue el final. María Eugenia Lanzetti -Marita- lo denunció por amenazas y violencia de género varias veces. La Justicia le dio un botón antipánico en septiembre del año pasado y ella lo tenía encima, aún el día en que la mataron.
Marita tenía 45 años y dos hijas, una de 17 y otra de 21. Era maestra jardinera en la guardería Estrellitas traviesas, un maternal que -junto a una sala de atención de la salud- forma parte de un centro vecinal en el Barrio Jardín de la ciudad de San Francisco. “Marita era una chica espectacular, que tenía un trato muy amable y los niños la apreciaban mucho”, dijo a Télam el martillero del centro Carlos Bonzazo.
Ese día había pocos chicos en el jardín por la lluvia. Ella y otras dos maestras se juntaron en una sala con los alumnos que no faltaron. Estaban en plena actividad cuando Bongiovanni entró. Las compañeras llamaron a la policía y lo detuvieron en la calle media hora después del ataque. El fiscal Bernardo Alberione confirmó a los medios que la víctima murió en el acto por los cuchillazos.
“Estuvieron juntos ocho años, era normal que discutieran pero un día le pegó”, dijo en una entrevista televisiva José María, el hijo de la mujer que trabajaba en la casa de Lanzetti. Después la pareja se separó y él se volvió muy obsesivo y empezó a perseguirla a todos lados. Bongiovanni tenía problemas psiquiátricos: “No se podía acercar a ella y buscó la manera para hacer esto”. La mamá de José María le había contado que el ex marido ya había intentado matarla antes.
El hombre era dueño de Bongiovanni Hermanos, una empresa dedicada a la fabricación de envases termoplásticos. Según el diario La Voz, hay una versión que dice que Bongiovanni se había escapado ese día de una clínica psiquiátrica. Otro relato descarta que el ex estuviera internado, en cambio sugiere un viaje reciente al exterior. Todavía no hay certezas, pero hoy el fiscal del Área de Delitos Complejos local Alberione recibió las pericias psiquiátricas y concluyó que es imputable.
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Marita fue la quinta mujer asesinada en manos de un varón en Córdoba en 2015. Un mes antes Andrea Castana habìa aparecido muerta en el Cerro La Cruz donde había ido a caminar. El informe de La Casa del Encuentro registró 21 femicidios en Córdoba durante 2014, 277 en todo el país. Otro estudio de la Comisión sobre Temáticas de Género de la Defensoría General de la Nación muestra que tres de cada diez mujeres que sufren violencia de género en la Ciudad de Buenos Aires denunciaron que los agresores no cumplen con las medidas de protección que les impone la Justicia para evitar que sean atacadas. Dos de cada tres denunciantes dijeron que después de separarse, la violencia aumentó. En casi todos los casos el agresor era pareja o ex pareja y en la mayoría tenían hijos en común.
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