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Cosecha Roja.-

Muchos clientes de la empresa telefónica Claro no sabían que cuando estaban comprando un celular, sus nombres, tarjetas de crédito y cuentas bancarias serían usados para una estafa. Fuentes policiales explicaron a Cosecha Roja quiénes eran y cómo actuaban los estafadores: desde hacía 6 meses una mujer de 22 años empleada de la telefónica robaba datos de los clientes.  Y operaba en familia. Su hermano de 20 años era el hacker informático y su madre quien realizaba compras de todo tipo y transferencias bancarias.

Hoy, los tres estafadores declaran ante la jueza Amelia Vence, a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 2 de la localidad de San Martín. Si bien en el Juzgado no quisieron dar información, las fuentes policiales no descartan que los tres implicados sean parte de una banda más allá del “negocio” familiar.

Cuando la policía allanó ayer el domicilio de la madre en la localidad bonaerense de Ciudadela, encontró objetos y documentos que no le pertenecían a la familia: una  laptop, fotocopias de documentos de identidad adulterados, tarjetas de crédito, tickets de pago de distintas compras, facturas de Claro y tres celulares.

La mayoría de la compras las hacían por teléfono o por Internet utilizando siempre tarjetas VISA. La operativa era sencilla: la empleada de Claro recababa el número de tarjeta y el código de seguridad y después, junto a  su hermano y su madre efectuaban pequeñas compras que iban a parar a los resúmenes de cuenta de los estafados. La estrategia de compra estaba estudiada: se hacía en cuotas para artículos más costosos y con débito para compras menores.

Las estafas por intermedio de transferencias bancarias fueron más complicadas. Abrían cuentas en algunos bancos y luego de pasar el dinero, las cerraban inmediatamente. Las fuentes policiales sospechan que los estafadores abrían las cuentas bancarias con documentos de identidad adulterados. Y que también, mediante el “hackeo” del hermano menor de la empleada de Claro, se realizaron transferencias a cuentas de terceros.