Una empleada del hotel Acapulco de Lomas de Zamora abrió la puerta de la habitación 113 y encontró el cuerpo de Delfina Encarnación Quispe Pumahuacre, de 51 años, sobre la cama. Estaba boca arriba y tenía golpes en la cara y en el cuerpo.
La mujer había llegado la noche anterior con su ex pareja, Alfredo Agustín Noriega, en un Peugeot 505. A las 8.30 de la mañana el hombre pagó la habitación y se fue solo. Después llamó a la hermana. Le dijo que había tenido una discusión con Delfina y que la había asesinado en el hotel.
Los hijos y una hermana de Noriega fueron hasta el hotel. Cuando llegaron había una ambulancia del SAME y policías de la comisaría 7ma de Lomas de Zamora.
La fiscal Marcela Juan, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Violencia de Género de Lomas de Zamora, pidió la captura de Noriega, que fue detenido ayer en Julio Verne y Emerson, en Lomas de Zamora, cerca de la casa de una de sus hermanas.
La fiscal no utilizó la figura de femicidio -incorporada al Código Penal en 2012- y lo imputó por “homicidio agravado por el vínculo”, que prevé la misma pena: prisión perpetua.