Por Nahuel Levaggi*
Tardé 2 días en decir algo por acá sobre la infame represión del viernes en Constitución. La verdad es que el pueblo iba diciendo todo lo que había para decir y lo sigue haciendo. Con creatividad, bronca y humor.
Las imágenes dicen todo.
El viernes el poder se asustó de 2 grandes armas que tenemos: la comida y nuestra dignidad. Se asustó tanto que las quiso reprimir.
Nos golpearon, si, pero cada palazo nos hizo más fuertes.
Nos gasearon, si, pero cada gas fue más oxígeno.
Nos balearon, si, pero cada bala nos agrandó el corazón.
Nos robaron la verdura, si, pero producimos más y más y más y más. Y nunca dejaremos de hacerlo. Y nunca dejaremos de garantizarle al pueblo el alimento… a esa abuelita que busca la berenjena con la Infantería detrás.
Somos quienes damos de comer al pueblo. Nuestras manos cayosas y con tierra tienen más fuerza que cualquier golpe, nuestra convicción es más profunda y firme que cualquier orden del poder, nuestros cuerpos aguantan cualquier clima.
No odio a los policías (pobres plebeyos del poder). Amo a mis cumpas trabajadores y trabajadoras. No odio a Macri y Larreta. Amo a nuestras organizaciones del pueblo. No odio los palos, balas y gases que nos dieron, amo nuestra dignidad. No odio su cobardía, amo nuestra valentía. No odio al capitalismo, amo el buen vivir. Amo a mis hijes, amo a mis cumpas, amo a la abuelita que se agacha por una berenjena. Amo a la agroecología, a la igualdad de género, a la lucha, a nuestra UTT.
No odio, amo. Y por eso venceremos, no tengo ninguna duda. El viernes pasado el amor venció al odio, no se equivoque nadie. La lechuga venció al palo.
El viernes se expuso lo más crudo del modelo que se viene imponiendo: hambre y represión. Esta es la realidad. Amigue: apagá TN y salí a la calle, dejá de leer Clarín y mirá a tu alrededor, esa es la realidad.
Para la próxima semana convocamos a un gran Feriazo nacional. Al hambre palos o lechuga, vos elegís de qué lado estás. Nosotres ya lo hicimos, ya lo hacemos diariamente.
Por nuestros hijes, por la abuelita que busca la berenjena, por todes.