Foto: Micaela Cattaneo

Foto: Micaela Cattaneo

Hay pañuelos que son verdes
Como yuyito del campo
Así la esperanza crece
Así florece este canto
Por Adriana Serrudo*

En los últimos meses el auge del debate por la legalización del aborto llegó a todas partes y regó las redes y nuestras propias vidas de comentarios a favor y en contra. Para lxs salteñxs que vivimos fuera de la provincia este debate supuso muchas veces discusiones con familiares, amigxs o conocidxs, intercambios y posicionamientos no siempre sencillos. Es públicamente conocida la posición de lxs legisladores salteñxs: en el debate y posterior votación en Diputados el pasado 14 de junio, Salta fue de las 2 provincias cuya totalidad de representantes votaron en contra.

#El15ALas15

Una amiga salteña me consulta si estoy al tanto de lo del 15, una movida iniciada por la cineasta salteña Lucrecia Martel, que convoca a juntarse entre salteñxs que están/estamos movilizadxs porque lxs representantes salteñxs en el Congreso nacional argumentan una unicidad salteña contraria a la legalización del aborto.

Hay un grupo de wapp y undoc donde colocar nombre, profesión y lugar desde donde se participaría de la foto a ser tomada el domingo 15 de julio a las 15. Las previsiones iniciales de la convocatoria fueron bastante humildes, juntar unas 50 firmas más lo que pueda sumar el nombre y prestigio de personajes famosos como Martel y otrxs artistas convocantes.

El martes mismo cuando estampé mi nombre en el listado había cerca de 300 personas, durante los días que siguieron se fueron sumando varios cientos más: quienes están en la provincia, en otras ciudades y localidades y también fuera del país. Mientras el grupo de wapp crecía, con festejos y promesas de premios cada nueva centena, las sensaciones y discusiones acerca de lo que se quería plasmar se hacían cada vez más ricas e intensas. A tal punto creció la convocatoria que circuló la frase “esto pasó de una fotito a un manifiesto ciudadano”.

Se elaboraron dos documentos, uno escrito y firmado por Martel que circuló los días previos a la convocatoria y otro con un carácter de manifiesto ciudadano al que adherimos lxs firmantes y que se fue modificando con las discusiones y aportes en el grupo de wapp. Este documento recupera mucho de lo manifestado por la cineasta suma al debate en una Salta que se piensa, se construye y se constituye desde su diversidad y complejidad. El manifiesto se presenta como una exhortación a lxs representantes salteñxs pero también es una invitación al conjunto de la ciudadanía salteña a repensarse en el marco de este debate teniendo en cuenta la triste realidad de Salta en términos de muertes por abortos clandestinos, femicidios y violencias que tienen como centro el/los rol/es de género en este mundo en transformación.

La salteñidad al palo

La “salteñidad” como marcador de cierta identidad común a todxs quienes nacimos y/o nos criamos en Salta es debatida desde hace algunos años, ya sea en la academia o en construcciones marketineras de impulso turístico. La cuestión del “ser” salteño pareciera representar una suerte de esencia con características homogéneas: la zamba o el folklore, las empanadas con papa, el poncho entre otras hace parte de lo que implicaría ser o sentirse salteñx.

Esta identidad también es disputada en el debate por el aborto legal y gratuito. Mientras lxs representantes políticos de la provincia manifiestan abiertamente su negativa a la legalización con discursos que apelan a una supuesta identidad salteña ligada al catolicismo y “a favor de la vida”, existe también un amplio y creciente colectivo de ciudadanxs que sostiene el debate por una Salta que respete y se manifieste a favor de la vida de todxs y legalice de una vez el aborto que clandestinamente mata sobre todo a las mujeres en condiciones de mayor vulnerabilidad.

Foto: Rodrigo Saravia, Cecilia Lutufyan, Bea Juarez, Alejandro Gallo, Rodrigo Moscoso, Ivana Salfity

Foto: Rodrigo Saravia, Cecilia Lutufyan, Bea Juarez, Alejandro Gallo, Rodrigo Moscoso, Ivana Salfity

Muchos son los testimonios que circulan sobre las disputas reales o virtuales en este tiempo: desde encontronazos en las manifestaciones por la legalización del aborto con lxs que se manifiestan como “pro-vida” o los comentarios en webs de diarios donde en lugar de argumentos se acude fácilmente al lenguaje violento y desacreditador. Entre los más perversos están los encuentros en estas movilizaciones entre médicos conocidos por practicar abortos que se topan frente a frente con sus pacientes clandestinas. Nadie admite públicamente estas prácticas que son un secreto a voces, mientras tanto se sigue negando el derecho a la vida de miles de salteñas muertas por abortos clandestinos.

La identidad, al fin de cuentas y como dijo Galeano, no es esa pieza quietecita en la vitrina… en el caso de la “identidad salteña” algo parece estar moviéndose hace rato, sólo tardamos en vernos, visibilizarnos y manifestarnos. Hoy cuando terminamos el encuentro en Buenos Aires, el puñado de salteñxs allí presentes nos abrazamos en la discusión que ahora está ya plasmada en el Manifiesto Salta: “… estamos entregados a abrir las fronteras de una identidad múltiple. Salta es la provincia argentina de mayor diversidad cultural del país, con fronteras abiertas a 3 países y muchas provincias, destino de viajeros del mundo, con una rica historia de intercambios culturales… Es un falso feudo la salteñidad, somos un territorio de fronteras abiertas”.

A la fecha el Manifiesto y la carta a entregar a los legisladores tienen más de 900 firmas de ciudadanxs salteñxs, unas 60 personas participamos de la convocatoria en Buenos Aires y otras 500 en la ciudad de Salta. Nuevos vientos, nuevos lenguajes y nuevas formas nos convocan #QueSeaLey #SaltaPorAbortoLegal

Foto: Colectivo Borde

Foto: Colectivo Borde

*Antropóloga salteña, doctoranda en Antropología IDAES- UNSaM