El domicilio de un feto es el vientre de la madre y su identificación es el ADN. El síndrome de Down es una “enfermedad incurable”. El movimiento a favor de la interrupción voluntaria del embarazo es comparable al fascismo, al nazismo y al terrorismo de Estado. Algunos expositores y expositoras que se oponen al aborto legal hicieron gala de su ignorancia en el tema durante el debate de ayer en el Senado de la Nación.
El senador formoseño José Mayans intentó debatir con la jurista y expositora Nelly Minyersky, una de las pioneras en la lucha por el aborto legal, seguro y gratuito en Argentina. Mayans basó su intervención en el Código Civil y Comercial: dijo que el artículo 14 es “taxativo” y que “la existencia de la persona humana comienza con la concepción”.
—La persona es una definición jurídica en un código. El artículo 21 dice que si no nace con vida se considera que la persona nunca existió —explicó Minyersky, una de las redactoras del Código que citó Mayans.
También aclaró que el feto “no tiene los mismos derechos que tiene la persona corpórea”. Por ejemplo, “no tiene domicilio”, explicó.
—El domicilio es el vientre de la madre y su identificación es el ADN —respondió el senador sin sonrojarse.
Nelly Minyersky no le contestó. Siguió su exposición con argumentos jurídicos. “Si encuentran un tratado que mencione los derechos del feto, les doy un premio”, cerró.
La frase de Mayans no pasó desapercibida en las redes. “Si lo dejan seguir hablando es capaz de pedir código postal al útero”, escribió la periodista Marcela Ojeda. “Nos merecemos una vara intelectual más alta en ambas Cámaras. Tampoco pido tanto, pero quererla correr a Nelly Minyersky con el Código Civil cuando es abogada y redactora del mismo texto me parece demasiado”. “Dice Mayans que el feto es una persona y el vientre materno es -ATENCION- EL DOMICILIO! Lo que quiere decir que el parto es la ejecución de una orden de desalojo”, publicó otro usuario de Twitter.
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Otro de los expositores destacados de la audiencia de ayer fue el doctor en biología molecular Alberto Kornblihtt, quien ya había tenido una intervención sobresaliente en Diputados.
Kornblihtt explicó que en los países en los que está legalizado el aborto, el “genetic couseling” permite que “si se hace un diagnóstico prenatal y se sabe que el niño va a nacer con una enfermedad para la cual no hay cura, se le informa a la madre, o a la pareja, que puede tener la posibilidad de interrumpir el embarazo”.
—Está claro que si de pronto detectan que un niñito con síndrome de down… —intervino la radical tucumana Silvia Elías de Pérez.
—Yo no dije síndrome de down, dije una enfermedad incurable —interrumpió Kornblihtt— ¿Usted cree que el síndrome de down es una enfermedad?
—No, no, pongamos una discapacidad…
—¿Usted cree que el síndrome de down es una enfermedad? Lo dijo usted.
—Está bien.
—No, no está bien. Está mal.
El moderador intervino y pidió a la senadora que haga la pregunta.
—¿Usted está recomendando abortos eugenésicos? —indagó Elías de Pérez.
—No, el aborto no se recomienda, el aborto es una opción —cerró Kornblihtt.
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El periodista de la Nación y fervoroso militante en contra del aborto legal Mariano Obarrio citó en el Senado algunos mitos sobre la interrupción voluntaria del embarazo. Dijo que esta ley “crea un incentivo para que aumenten los abortos”, que no “tiene en cuenta el derecho de los hombres” y que se promueve el negocio de “venta y el tráfico de órganos”.
Después fue un poco más lejos. “Los movimientos sociológicos y políticos nunca pueden pasar por encima de la ley. Cuando pasó esto en la historia sobrevinieron grandes tragedias humanitarias: el nacionalsocialismo, el fascismo y el terrorismo revolucionario y de Estado”. “Todos esos eran movimientos que despreciaban la vida en nombre de un interés superior”, dijo.
“Le pido a usted que no me llame ni genocida ni asesina por votar como me dicta la conciencia”, lo cruzó la senadora tucumana Beatriz Mirkin.
El debate se extendió hasta cerca de las 21 por las intervenciones de los senadores y continúa hoy. El 8 de agosto el proyecto de ley llegará al recinto.