La Jornada.-
Desde 2006 a la fecha en el país han sido asesinados más de mil funcionarios municipales y 31 alcaldes –pertenecientes a todos los partidos políticos– a causa de la violencia desatada por el crimen organizado, según el último reporte de la Federación Nacional de Municipios de México (Fenamm), que incluye el homicidio del munícipe interino de Nahuatzen, Michoacán, ocurrido el pasado lunes.
De acuerdo con el reporte, estos 31 asesinatos se concentran en 14 entidades del país, siendo Durango y Michoacán las que registran el mayor número de ejecuciones, con cinco cada uno.
A esta cifra se suman tres alcaldes más, quienes fueron ultimados antes de asumir el cargo, según el reporte, el cual incluso hace un análisis comparativo con la situación que vivió Colombia, pero que gracias a un programa eficaz de protección a alcaldes y concejales amenazados logró el decremento de los homicidios en los pasados seis años, a sólo tres asesinatos.
Con esto México supera la cifra del país que durante la década de los noventa fue considerado como uno de los más peligrosos del mundo
, señala el documento de la Fenamm, organización que agrupa a los alcaldes priístas de toda la República.
En el desglose, la Fenamm señala que 2010 fue el año más trágico para los alcaldes, con 12 asesinatos, la mayor cantidad registrada durante el sexenio del presidente Felipe Calderón. “Al iniciar 2011 se pensaba que sería un año negro para los municipios, ya que en las primeras dos semanas fueron tres los presidentes municipales asesinados; no alcanzó la cifra de 2010, pero terminó el año con un registro de siete, superando a 2008, con cuatro casos; 2009 con cinco, y 2006, con una ejecución”.
En 2012 se registró la muerte de la alcaldesa de Tlacojalpan, Veracruz, siendo la única mujer en la lista de los 31 munícipes ejecutados. Ese año, junto con 2006, fueron los de menor cantidad de homicidios reportados.
El resto de los estados donde han sido asesinados alcaldes son: Chihuahua, Guerrero, Oaxaca, con tres cada uno; Nuevo León, estado de México y Veracruz, con dos, y Coahuila, Zacatecas, Tamaulipas, San Luis Potosí, Morelos y Tabasco, con uno cada uno.
De los 31 alcaldes asesinados, 19 de ellos pertenecían al PRI, cinco al PAN, dos al PRD y cinco de otros partidos.
Del análisis realizado por la Fenamm, se señala que los presidentes municipales de ciudades pequeñas son más vulnerables de recibir ataques, pues 87 por ciento de estos asesinatos han ocurrido en alcaldías con una población menor a 50 mil habitantes.
Además, estos atentados también se han reflejado en su mayoría de acuerdo con la situación económica y social que enfrentan los municipios, debido a que 70 por ciento de los homicidios se han perpetrado en ciudades de altos índices de marginación.
Ante esta realidad, la Fenamm ha presentado dos iniciativas: una, para decretar la creación del programa de protección a presidentes municipales, que garantice su integridad física, que incluya la dotación y suministro de equipamiento necesario y capacitación a los funcionarios para hacer frente a situaciones de riesgo y, dos, ampliar los recursos destinados al fortalecimiento de la seguridad pública municipal.
Actualmente, aunque se cuenta con el Subsidio para la Seguridad de los Municipios (Subsemun), que se integra con recursos federales, sólo beneficia a 239 alacaldías, 10 por ciento del total que existe en el país.
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