El País.-
La marihuana ha convertido a Morgan Freeman en trending toppic mundial; incluso su nombre se ha colocado en el segundo puesto de los temas más comentados en Twitter. En una entrevista concedida esta semana a la publicación americanaThe Daily Beast, el actor defendió abiertamente la legalización de la marihuana en su país, y volvió a reconocer que él la consume desde hace años por sus “múltiples usos útiles” y, especialmente, por sus cualidades paliativas para aliviar los dolores que sufre en el brazo izquierdo a consecuencia del grave accidente de coche que sufrió en 2008.
“Solían decir que ‘Si fumas eso, te enganchas”, cuenta en la entrevista. Él empezó a consumirla con su primera mujer, Jeanette Adair Bradshaw, con quien estuvo casado entre 1967 y 1979. “¿Cómo la tomo? ¡Como venga! La como, la bebo, la fumo, la esnifo!”, dice el intérprete ganador de un Oscar porMillion Dollar Baby.
A sus 77 años, Morgan Freeman es uno de los actores más activos en Hollywood. Mantiene un ritmo constante de tres o cuatro películas anuales a pesar de que no ha recuperado el movimiento ni la sensibilidad en el brazo izquierdo tras el accidente. En las entrevistas recibe a los periodistas con un guante de cuero compresor, lo mueve con ayuda de su brazo derecho y se toma descansos entre unas charlas y otras, aquejado por el dolor.
“Tengo dolor fibromiálgico en este brazo, y lo único que me da algún alivio es la marihuana”, le confesó al periodista americano. “Han descubierto que a los niños con ataques epilépticos les ayuda y les permite tener una vida. Para mí, eso dice claramente: ¡Legalícenla a lo largo de la frontera!”.
“¿Y cuáles son los efectos negativos [de esa legalización]?”, se pregunta él mismo en la entrevista. “Mira Woodstock, 1969. Dijeron: ‘No vamos a molestarles o decirles nada sobre el uso de la marihuana’. Y no hubo ni un problema, ni una pelea. Ahora mira lo que pasó en 1999”, explica Freeman, refiriéndose a los arrestos y disturbios durante el aniversario del mítico concierto.
El consumo y legalización de cannabis es uno de los debates más candentes en EE UU en los últimos años, después de que cuatro Estados la legalizaran y otros 12 permitieran su uso medicinal y despenalizara la posesión. “Este movimiento lleva en marcha mucho tiempo, y va cogiendo fuerza, cada vez más fuerza. Ahora, el golpe final es entender que el alcohol no tiene uso medicinal real”, continúa el actor de Cadena perpetua. “Quizá si te tomas una copa, se te calme, pero si tomas dos o tres, estás jodido”.
Freeman no es el primer actor que reconoce públicamente su consumo con fines paliativos o defiende su legalización. Otros reconocidos defensores son cantantes como Miley Cyrus, Justin Timberlake, Rihanna; o los presentadores Jimmy Kimmel o Jon Stewart; y también reconocidos actores, como Seth Rogen, Jack Nicholson o Susan Sarandon, quien decía también en The Daily Beast hace unos meses que una vez sea legalizada en todas partes, “hará del mundo un lugar más amable”. Más recientemente, la actriz Roseanne Barr admitió usar marihuana para combatir la “degeneración macular y el glaucoma” que sufre. “Es una buena medicina para un montón de cosas”, dijo la actriz famosa en los noventa por su serie Roseanne.
Morgan Freeman está en plena promoción de su próxima película, 5 Flights Up (Ruth & Alex), primera que rueda con una de las actrices a las que más admira, Diane Keaton. Juntos interpretan a una pareja interracial, algo que el actor no considera “un tabú” en Hollywood. “Este guión no estaba escrito como una pareja interracial, pero no era necesario. El cásting abierto permite encontrar al mejor actor para cada papel”, concluye Freeman en la entrevista, despejando así los comentarios sobre desigualdad racial, que él al menos cree superados. Como siempre recuerda, ha “interpretado a Dios”.
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