Cosecha Roja.-
Julián y Graciela son miembros de la policía local de La Plata. El viernes dejaron a sus hijos de 3 y 10 años en el auto y entraron a la fiesta del centro cultural ‘En eso estamos’. Ahí discutieron, forcejearon y los vecinos intervinieron. Él sacó un arma, disparó para todos lados e hirió a un estudiante de psicología, que estaba a 10 metros. Dos días antes otros agentes detuvieron a Juan Martín Yalet por un robo y lo subieron a un patrullero: el joven terminó muerto con un disparo en la cabeza. La Justicia detuvo a ocho policías por homicidio calificado, ellos insisten con su versión: Yalet se suicidó dentro del móvil. En lo que va de 2015, 80 personas murieron en manos de agentes de las fuerzas de seguridad.
Según el informe del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), en el 68 por ciento de los casos en los que murieron civiles en manos de policías en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, los oficiales estaban fuera de servicio. El ‘estado policial’ fue uno de los ítems que se discutió en 2014, antes de la creación de las policías locales en la Provincia.
El proyecto que se aprobó por resolución 835/14 del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires no contempló ninguna modificación: los policías son policías las 24 horas. “Esto es una especie de profecía autocoumplida: cuando se impuso este proyecto que aflojaba las iniciativas en términos de control de la policía previmos que iba a haber un aumento de casos de uso irracional y abusivo de la fuerza”, dijo a Cosecha Roja Manuel Tufró, coordinador del Equipo de Seguridad Democrática y Violencia Institucional del Centro de Estudios Legales y Sociales.
***
Una vez que Rafael -el estudiante de psicología- cayó herido, sus compañeros lograron detener al agente y que dejara de disparar. Cuando llegó la policía -antes que la ambulancia – lo llevaron en el patrullero al Hospital San Martín. El disparo que recibió en el abdomen comprometió el hígado y el pulmón y tuvieron que operarlo dos veces.
Los integrantes de ‘En eso estamos’ contaron en un comunicado: “Cuando nos enteramos de que era policía, al desconcierto de que te caguen a tiros dentro de tu casa se sumó la bronca”. El miércoles 9 marcharán para pedir que “la violencia no cope la calle”. La Comisión Provincial por la Memoria y la Asociación Miguel Bru siguen el caso.
La causa quedó a cargo de la fiscal Betina Lacki (UFI 2) y fue caratulada como homicidio doblemente calificado en grado de tentativa por la condición de fuerza de seguridad y por el empleo de arma de fuego y los dos quedaron imputados. Julián Cabañas permanece detenido y su mujer fue liberada. Ambos se negaron a declarar.
***
El robo por el que acusaron a Yalet fue cerca de las 8 de la mañana en una casa en calle 2 y 66. Un vecino llamó a la policía para denunciarlo y rápidamente llegó un patrullero a la esquina. Montaron un ‘operativo cerrojo’ y lo encontraron escondido en el techo de una vivienda lindera. Lo metieron en el móvil y salieron. Pocos minutos después de las 9 el joven llegó herido al Policlínico San Martín y falleció.
Al día siguiente la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense apartó preventivamente a los tres efectivos que iban en el móvil y la investigación pericial quedó a cargo de Gendarmería Nacional. El miércoles desafectó a ocho agentes y la fiscal Betina Lacki los imputó por homicidio agravado por alevosía, abuso de funciones y uso arma de fuego, además de falsificación material e ideológica. “La situación conflictiva por la que se había convocado a la policía ya había sido resuelta. Eso es lo que más preocupa”, dijo a Cosecha Roja Rodrigo Pomares, director del programa de Seguridad Democrática de la CPM.
A los policías Cristian Caffa, Mónica Arias, Walter Fernando Rodríguez Muller, Daniela Aprea, Michael López González, Luciano Díaz, Patricia del Carmen Paris y Laura Gutiérrez les retiraron la chapa, el uniforme y el arma. Cinco de ellos habrían participado del hecho y otros tres están acusados de truchar las actas. Ante la fiscal declararon que el hombre se “autolesionó” con una pistola 9 milímetros que llevaba entre las prendas. Para Lacki resultó inverosímil: el hombre de 35 años estaba esposado.
“En las últimas semanas se registraron casos graves de violencia policial que involucran a funcionarios de las nuevas policías locales de la provincia de Buenos Aires”, escribieron en el informe. Para ellos, la creación de las policías en 2014 -así como la de la Metropolitana en 2008- es una oportunidad desperdiciada para trabajar en modelos de fuerzas de seguridad menos violentos. “La idea de ‘emergencia de seguridad’ que enmarcó la política provincial en el último año y medio dio lugar a un rápido proceso en el que se privilegia la cantidad de agentes despachados a las calles, mal formados y con débiles mecanismos de control”, dijeron. Se arrastran los problemas estructurales de la Bonaerense y las fuerzas federales.
[Nota publicada el 4/9/2015]
0 Comments on "Policías locales fuera de control: disparar en una fiesta, matar en un patrullero"