Por Luciana Mangó. El Ciudadano.-
Luis Marcelo Escobar, el locutor acusado de abusar sexualmente de 18 chicas, conocerá este miércoles si los jueces María Isabel Mas Varela, Patricia Bilotta y Mariano Aliau aceptan el pedido de 50 años de prisión que hizo la Fiscalía. A lo largo del juicio declararon 200 personas, entre víctimas, familiares, policías y peritos. Las 18 víctimas, cinco de las cuales declararon en el formato Cámara Gesell, porque aún son menores de edad, coincidieron en la descripción del acusado y en la forma de engañarlas. La fiscal Carla Cerliani dijo que está probado que Escobar fue el autor de los hechos. En la última jornada del juicio, el hombre de 42 años, admitió los ataques y pidió perdón a las víctimas y sus familias. Sin responder preguntas, también contó que había decidió hablar con una psicóloga y confesar que había sufrido dos abusos sexuales en su infancia. La defensora oficial, Luisa Cañabate, pidió a los jueces que ese dato sea tomado en cuenta como atenuante de la posible pena.
En primera persona
Durante casi un mes 13 chicas y sus familiares le contaron a los jueces lo que vivieron entre 2014 y 2016, cuando tenían entre 14 y 25 años. Salvo una chica, el resto pidió hacerlo sin la presencia del acusado. Otras cinco hablaron en el formato Cámara Gesell. Contaron cómo el hombre al que describieron como “morocho y gordito” las llevó engañadas a un descampado donde las violó.
“Mejor arreglemos entre nosotros”, señalaron las víctimas que les decía después de hacerse pasar por un policía antidrogas. La estrategia, siempre según dijeron las víctimas, era la misma: las contactaba en la calle o en una parada del colectivo y con una credencial falsa fingía ser policía. Las acusaba de vender drogas para subirlas al auto con la excusa de llevarlas a una comisaría y averiguar sus antecedentes. En el recorrido les preguntaba por su vida privada y simulaba hablar con otra persona por un handi. Luego desviaba y las llevaba a un descampado donde las violaba amenazándolas con un arma. En dos ocasiones actuó con un acompañante que no fue localizado por la Justicia.
Según señaló la fiscal, Escobar exhibió el arma en 15 de los 18 hechos. A 12 víctimas las amenazó con dispararles y tirarlas al río. Después de abusarlas, las dejaba cerca de sus casas y les prohibía mirar para atrás o contar lo que les había hecho. Una de las víctimas no le hizo caso. Reconoció el auto y describió la patente. Su testimonio fue clave para que la Policía lo arrestara el 20 de agosto de 2016 en Soldini. Desde entonces está detenido.
La fiscal precisó que todas las víctimas lo reconocieron y en seis de ellas encontraron ADN del acusado. En dos casos, el agresor desistió de abusar a las jóvenes. Con las pruebas presentadas, Cerliani ratificó el pedido de 50 años de prisión “por 11 de casos de abuso sexual con acceso carnal agravado por arma de fuego, dos de abuso sexual con acceso carnal, dos hechos de tentativa de abuso sexual carnal agravado por uso de arma de fuego, dos abusos simples agravados por uso de arma de fuego y un abuso sexual simple”.
Este miércoles, a las 13, los jueces María Isabel Mas Varela, Patricia Bilotta y Mariano Aliau darán a conocer la sentencia.
La confesión
En la última audiencia del juicio, Escobar pidió hablar. Dijo que la psicóloga a quien visitó por primera vez el día anterior lo “convenció” de “sacar” lo que tenía adentro para liberarse. Frente al tribunal el hombre pidió perdón a las víctimas y a sus familias y contó que cuando tenía 10 diez años fue abusado por dos hombres.
“Necesito pedir perdón a las víctimas, a los familiares, a mis hijos y a mi familia por algo que quizás hice sin conocimiento por lo que me pasó cuando era chico”, dijo.
La defensa pidió que los jueces lo tomen como un atenuante al momento de la sentencia.