Foto: Rivadavia Online
Una nena de 11 años llegó el viernes al hospital de América, cabecera del municipio bonaerense de Rivadavia. Le dolía la panza y estaba acompañada por su abuela. Cuando los médicos la revisaron detectaron un embarazo de 8 meses.
La abuela se presentó el lunes siguiente en la comisaría para hacer una denuncia por violación. Su nieta, dijo, le contó que dos hombres encapuchados la llevaron a un descampado y que ella se desvaneció. Ahí comenzó una investigación que hasta ahora tiene un imputado: el tío de la nena, de 18 años, que en el momento del abuso tenía 17. La abuela estuvo aprehendida hasta hace unas horas por falsa denuncia y posible encubrimiento. La liberaron por falta de pruebas.
La niña vive con su abuela en la localidad anexa de Fortín Olavarría. Según la historia vecinal, ambas llegaron hace unos años al pueblo desde la provincia de Corrientes y se instalaron en un terreno donde se construyeron seis casas en las que actualmente viven unas 35 personas, entre adultxs y niñxs. La madre de la nena vive en Corrientes y el padre está privado de la libertad, por lo que ella quedó a cargo de su abuela y su tío.
Fortín Olavarría es un pueblo agrícola de unos 1500 habitantes. Queda entre las localidades de América y Trenque Lauquen. Pertenece al municipio de Rivadavia, en el noroeste de la provincia de Buenos Aires y a 450 kilómetros de la Ciudad. Sus vecinos y vecinas lo describen como un lugar “muy chico, pero muy tranquilo” con un banco, una escuela primaria –la número 5, en la que la nena cursa sexto grado– y dos secundarias: una básica y una agraria.
Al terreno donde vive la comunidad de correntinos la llaman “la villa” o “el barrio cerrado”. No están acostumbradxs a esas construcciones tipo vecindad. Y de la abuela dicen que es una “matriarca” o una “caudilla”.
–Ella controla quién entra y sale de ahí– dice M., docente y una de las vecinas del lugar.
Las historias de violencia intrafamiliar y de embarazos adolescentes se escuchaban en la escuela y en la calle, pero ya estaban naturalizadas. El embarazo de la nena de 11 años terminó con la indiferencia. El miércoles por la mañana lxs vecinxs hicieron una marcha en el centro del pueblo. “En este pueblo denunciamos chusmerio barato, pero no denunciamos lo importante. La única diferencia entre esa nena y cualquiera de nosotras es que caímos en otro contexto”, dijo una de mujeres.
Es la primera vez que Fortín Olavarría se moviliza. Incluso, en la marcha también estuvieron el Comisario Sergio Rodríguez, titular de la Policía de la cabecera del distrito y la Sub Comisario Verónica Sequeira, Jefa de la Comisaría de la Mujer y la Familia. Rodríguez les pidió a lxs vecinxs que se acerquen a la seccional a aportar cualquier información que consideren útil para la investigación.
Esa misma noche, el juez ordenó un allanamiento en la vecindad. Allí quedó aprehendido el tío de la niña, como presunto autor del abuso. Como era menor en el momento del hecho, la causa quedó en manos de la UFI 1, a cargo del fiscal de responsabilidad penal juvenil Martín Butti.
Este viernes hubo otra marcha, pero en América, la localidad cabecera del distrito. Fue convocada por Red Sorora, una agrupación feminista de Rivadavia.
Según contó Butti a Cosecha Roja, el acusado se negó a declarar y quedó detenido e imputado por abuso sexual con acceso carnal agravado por ser uno de los encargados de la guarda de la nena.
La nena está a punto de parir a sus 11 años. Está acompañada por el servicio local de promoción y protección de los derechos del niño. Y más adelante se la citará a declarar en Cámara Gesell. El lunes próximo habrá una audiencia en la que se decidirá si el imputado seguirá detenido o esperará el proceso judicial en libertad.